El Real Madrid no quiere una final de alto voltaje
Chus Mateo verbalizó la negativa del club a sumarse a las polémicas generadas desde el bando contrario
En este caso es el entrenador del equipo 'taronja', Pedro Martínez, quien protestó en la sala de prensa del Movistar Arena
Aunque lo hizo de forma elegante, recogió cable en la previa del tercer partido
Una final siempre es caliente. En cualquier deporte. Pero viniendo de una semifinal en la que el bando contrario ya se encargó de emplear el otro baloncesto, el Real Madrid ha decidido no dar más bombo a las polémicas en esta eliminatoria por el título de la Liga Endesa contra el Valencia Basket. Chus Mateo verbalizó el deseo del club blanco, que pasa por no entrar al juego de sus oponentes, algo que también trataron de evitar a toda costa contra Unicaja Málaga aunque fue tarea más difícil.
El entrenador rival, Pedro Martínez, estuvo bastante más elegante que Ibon Navarro, pero no dejó de protestar por el ya famoso tapón ilegal de Walter Tavares a Jean Montero antes de la canasta de Sergio Llull para empatar. «Estoy un poquito quemado con determinadas acciones que han pasado en el partido», afirmó.
«No entiendo que en el último minuto ninguno de los tres árbitros pite el tapón ilegal para ir a revisarlo. Y si no pita, no pueden verla ellos ni pedirla yo. Árbitros muy expertos, que saben cuando sí y cuando no. A estos árbitros les conozco de toda la vida, nos han pitado muchas veces, y en el conocimiento muchas veces está la realidad», añadió el técnico valencianista.
Sin embargo, dos días más tarde decidió apartar a un lado la polémica y centrarse en lo puramente táctico para llevar a su equipo a rascar una victoria con la que mantenerse vivo en la serie: «Tenemos que estar concentrados en lo que depende de nosotros. Los árbitros espero que hagan su trabajo, como el otro día. No es mi estilo hacer frases polémicas».
Apagafuegos Chus Mateo
Pero realmente quien apagó el fuego de lo que podía haber sido una tensión mayor fue Chus Mateo. Ni entró al trapo justo después de las quejas de su análogo ni tampoco lo hizo en la previa pese a que la primera pregunta formulada por los periodistas en Valdebebas buscase la respuesta del técnico madridista a Pedro Martínez.
«No me gusta hablar de esto. No hablo nunca, ni cuando me van bien las cosas ni cuando me van mal. Me parece poner el foco en algo con lo que no debemos distraernos. Nuestro equipo se centra en jugar lo mejor posible. Los factores externos como los árbitros en un momento determinado toman decisiones y son parte del juego. Es un factor más. No me gusta hablar de esto», dijo un Chus Mateo que se centra en lo realmente importante.
La 38 a un paso del Real Madrid
Y es que su equipo está a un paso de seguir haciendo historia en el baloncesto nacional. El Real Madrid ya acaricia su trigésimo octava Liga tras el 2-0 en el Movistar Arena y quiere cerrar la serie en La Fonteta para que el capitán Llull levante en la noche de este miércoles el primer trofeo de esta temporada, sin duda la más difícil de Chus Mateo en el banquillo del conjunto blanco.
El madrileño se juega mucho en esta final, ya que en el Real Madrid no se entiende una temporada sin títulos. Sus pupilos llegan en el mejor momento del año y posiblemente con el nivel más alto de los últimos tiempos. Un grupo perfectamente engrasado en el que los líderes habituales están sumando nuevos adeptos como Andrés Feliz, el recambio ideal para Facundo Campazzo que oposita a su primer MVP en un play off de Liga.