El Valencia respira con una victoria en Liga tres meses después (2-1)

• Miguel Zorío @miguelzorio
• Redactor de deportes. Apasionado del deporte y especialista en motociclismo.
• • 15/01/2017 16:45
  • Actualizado: 15/01/2017 16:45

El Valencia ha puesto fin a la mala racha en Liga casi tres meses después con una victoria ante el Espanyol por 2-1. Desde que se impusieran al Sporting el 16 de octubre de 2016 no había vuelto a sumar los tres puntos. Sumó cuatro empates y cuatro derrotas, que le hundieron en la zona baja de la tabla desatando una crisis en el club ché. Cuando todo parecía perdido resucitaron para volver al camino del triunfo.

Los de Voro sabían que este partido era vital, necesitaban ganar como fuese. Desde el primer minuto se vio a un Valencia diferente, peleón y dispuesto a llevarse los tres puntos con su mejor partido de la temporada. Pusieron en aprietos a Diego López nada más comenzar, llegando incluso a salvar en la misma línea el gol de Carlos Soler. Se lo empezaron a creer y Mestalla volvió a ser el jugador número 12, llevando al equipo en volandas hacia la victoria, convirtiéndolo así en la caldera que siempre ha sido.

Montoya adelantó al Valencia en el 18 tras una gran jugada colectiva de todo el equipo. Tocaron al primer toque como si fueran el Barça de Guardiola, desarbolaron la defensa y el lateral definió a las mil maravillas para hacer el primer tanto del partido. Esta vez el esfuerzo sí tuvo su recompensa, era clave tomar la delantera en el marcador para poder respirar y lo hicieron.

Tenían el dominio del balón y controlaban el partido a su antojo, pese a que tras el gol los de Quique Sánchez Flores se fueron hacia arriba en busca del empate pero sin crear excesivo peligro. El 1-0 era un resultado peligroso, más aún teniendo en cuenta la facilidad de los blanquinegros para encajar en los minutos finales. En la segunda mitad los pericos salieron apretando y se hicieron con el control, pero las ocasiones seguían sin llegar.

Mina sentencia y Mestalla estalla

No era el día del Espanyol, que se vio superado por el mejor Valencia de toda la temporada. Santi Mina sentenció el choque a 20 minutos para el final con el segundo, aprovechando un gran lanzamiento de falta lateral de Parejo que tuvo que sacar in extremis en la línea Diego López y el balón le quedó franco al delantero que remató a placer. Mestalla estalló con esa diana, veía como su equipo volvía a ganar en su estadio en Liga casi cuatro meses después.

Cuando todo parecía visto para sentencia, David López puso la incertidumbre con el 2-1. Los ché volvían a encajar otra vez en los instantes finales, aunque esta vez, por suerte, se quedó solo en un susto y el Valencia pudo sumar su cuarta victoria de la temporada. Un triunfo que les permite respirar y alejarse de los puestos descenso.