La plantilla del Madrid se conjura para ganarlo todo hasta final de año

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Javier Iglesias

El Real Madrid atraviesa una etapa inestable después de las derrotas contra el Sevilla y el Barcelona y las malas vibraciones que ha dejado sentir en otros partidos que sí ha podido sacar adelante. Los últimos ejemplos son el duelo frente el PSG en el Bernabéu o el último ante el Shakhtar, donde acabó pidiendo la hora pese a haber llegado a ir ganando por 0-4.

Sin embargo, la plantilla madridista prefiere quedarse con lo positivo de lo sucedido en Ucrania. El equipo protagonizó 78 buenos minutos ante un rival peligroso en su casa, ganó y ya son primeros de grupo. Ese era el objetivo de los jugadores del Real Madrid y su entrenador: volver a saborear la dulce sensación de la victoria y dejar atrás el regusto amargo de los tropiezos.

Hasta final de año el Real Madrid debe disputar ocho partidos entre Liga, Copa del Rey y Champions

Hasta final de año el Real Madrid debe disputar ocho partidos entre Liga, Copa del Rey y Champions y el reto de la plantilla es ganarlos todos. El calendario es asequible y eso ayuda a que los jugadores hayan decidido unirse, remar juntos (pese a los roces evidentes con Benítez) y pelear por todos los títulos.

Antes de que 2015 expire, el Real Madrid disputará cinco partidos de Liga, de los cuales tres son en casa –ante Getafe, Rayo y Real Sociedad– y dos fuera –contra Eibar y Villarreal–. Además, el conjunto madridista tiene el doble enfrentamiento copero contra el Cádiz (rival de Segunda B) y el último encuentro de fase de grupos de la Champions League ante el flojo Malmö en el Santiago Bernabéu.

Un gran oportunidad para Benítez

Benítez, que tiene el «apoyo total» de la directiva del Real Madrid, quiere aprovechar estos ocho partidos para reconducir la situación, reconciliarse con la plantilla y ganarse la confianza de una afición en la que no ha terminado de calar su método ni su estilo de fútbol.

El entrenador del Real Madrid aprovechará los dos partidos por semana para rotar, dar descanso a sus hombres clave y de paso otorgar minutos a otros menos habituales para se sientan importantes en el equipo. La aportación de los Lucas Vázquez, Jesé, Kovacic y compañía puede acabar siendo determinantes en una temporada tan cargada de partidos y que terminará antes de lo habitual por la Eurocopa de Francia en verano.

A priori, el calendario es teóricamente asequible para los madridistas, ya que sólo la salida a El Madrigal puede señalarse en rojo como un partido peligroso. El año arrancará con una siempre complicada visita a Mestalla, donde la campaña pasada comenzó la debacle y se acabó la racha de las 22 victorias consecutivas.

Los madridistas no encuentran mejor manera de afrontar ese duelo que con la confianza recuperada y la intención de iniciar un año en el que se consigan títulos. Además, el Barcelona tiene que visitar al Valencia el día 5 de diciembre y desde el vestuario blanco se confía en que pueda ser una buena oportunidad para recortar las distancias en la Liga antes de que 2015, annus horribilis para el Real Madrid, se despida de nuestras vidas.

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