Alejandro Blanco: “Mi propuesta es que Rafa Nadal sea el abanderado de España en Río”

Rafa Nadal representa un ejemplo para millones de españoles desde hace más de una década. Los despreciables comentarios de la ex ministra francesa Roselyne Bachelot no han hecho más espolear al deporte español a apoyar al tenista más laureado de nuestra historia. 

Alejandro Blanco ha salido en defensa de Nadal en los micrófonos de OKDIARIO afirmando que «Rafa es intocable, es un deportista modelo y es una persona excepcional». El presidente del Comité Olímpico Español propone al tenista como abanderado tras no poder serlo en 2012 por la lesión que ahora dice Bachelot fue una sanción por dopaje.

«El abanderado será elegido en el mes de junio-julio. El deporte español le debe mucho a Rafa y deberíamos replantear que Rafa sea el gran abanderado del deporte español. Rafa es un deportista universal que ya le nombramos abanderado en el pasado por sus valores y sus éxitos», afirma Blanco.

Toda mi confianza y apoyo a mi amigo @RafaelNadal #TodosSomosNadal pic.twitter.com/3Rfk5ZTj9m

— Pau Gasol (@paugasol) 13 de marzo de 2016

Que la Justicia vaya hasta el final

El presidente del Comité Olímpico Español se mostró muy molesto con la actitud mostrada por Bachelot. «Lo que ha dicho le desprestigia a ella misma. Ha tenido un momento de efímera gloria y le pesará en los próximos años», puntualiza el directivo.

Blanco defiende vehementemente la inocencia de Nadal, quien ha ganado 14 Grand Slam a lo largo de su carrera. «Se ha metido con un deportista al cual la Federación Internacional le ha hecho 20.000 controles. No puede ser atacar a un deportista, sea quien sea, sin ninguna prueba ni fundamento. Coincido con Rafa, hay que llevarla al juzgado», añadió.

Por último, el máximo dirigente del deporte español reflexiona acerca de los continuos ataques desde el país vecino cuando España consigue un éxito. «Habría que preguntarles a ellos por qué son así. España es un país admirado en todo el mundo por sus éxitos en la diversas disciplinas. Hay que respetar a los que tienen y no tienen éxito. Lo mejor que puede hacer la ministra es estar callada», zanja Blanco.