MUNDIAL DE FÓRMULA 1 2025: GP DE CHINA

Fernando Alonso vuelve a catapultar a Aston Martin: la paliza a Stroll que no se vio en Australia

El piloto español fue el segundo que más ritmo tuvo respecto a su compañero

Únicamente el tetracampeón del mundo dejó peor parado al debutante Liam Lawson

La trituradora de Red Bull se pone en marcha

Alonso
Fernando Alonso. (EP)
Kike Sáez

Suena fuerte decirlo después de que Fernando Alonso sufriera un accidente en la cita de apertura del Mundial de Fórmula 1 2025, pero al español le bastaron 34 vueltas para darle el primer correctivo del año a su compañero en Aston Martin, Lance Stroll. El diferencial de velocidad entre ambos pilotos fue de 0,648 segundos a favor del asturiano con el mismo monoplaza, el AMR25, la segunda ventaja más elevada sólo por debajo del palizón de Max Verstappen a su nuevo vecino de garaje, Liam Lawson, al que arrasó con 1,750 s más de ritmo de carrera en un desastroso debut con Red Bull del neozelandés.

Nada tienen que ver ambos casos, ya que como decimos Alonso se quedó sin argumentos al sufrir ese accidente a 23 giros del final por culpa de la acumulación de grava en uno de los pianos, pero si algo no engaña en un deporte como la F1 son los datos y estos marcan que, por ritmo, el asturiano podría haber logrado un resultado incluso mejor que el sexto puesto de Stroll.

De hecho, en el momento del incidente Alonso cabalgaba dos posiciones por delante del canadiense. Décimo y con un Kimi Andrea Antonelli incapaz de adelantarle con el Mercedes de por medio, el bicampeón del mundo iba lanzado a por la novena plaza que poseía Pierre Gasly.

Aunque Fernando lo negase, en ese momento acababa de entrar en zona de DRS respecto al de Alpine y era cuestión de tiempo que, por como se dio la carrera a posteriori, escalase hasta quién sabe sin un top 5, viendo que gracias a su accidente remontó del duodécimo al sexto puesto.

Fernando Alonso no deja de sorprender pese al accidente en Melbourne

Su concentración en seguir a través de las pantallas la actuación de Stroll reflejaba un deseo de estar ahí y tener la oportunidad de pescar en río revuelto. No pudo ser, acabó el Gran Premio de Australia a cero, algo que no le ocurría desde 2021 en su debut con Alpine, pero Alonso se llevó muchas conclusiones que tratará de llevar a buen puerto este fin de semana en Shanghái, un circuito que se le da especialmente bien.

Hasta su nuevo jefe, Andy Cowell, reconoció el ritmazo que el asturiano le exprimió a su nuevo Aston Martin, un coche que tuvo que domar bajo la lluvia en un trazado muy comprometido como el de Albert Park hasta que sufrió el inoportuno patinazo con esa montaña de grava que le impidió continuar y sumar buenos puntos.

«El ritmo de Fernando en las cinco vueltas previas al accidente era muy competitivo hasta el punto de que decidimos apretar. Así que hay prestaciones en el coche», alabó el capo británico, que se estrenó con el equipo verde en Melbourne. Esta primera paliza de Alonso y Stroll mantiene la tónica de lo que se vio en sus dos primeros años con Aston Martin. Si en 2023 fueron 132 los puntos de diferencia entre los dos a final de temporada, el curso pasado la brecha se redujo porque el coche era horrible, pero aun así rondó los 50 (46).

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