Benzema es el brote verde

• Francisco Rabadán @pacorabadan
• Redactor jefe de deportes. He tenido la oportunidad de cubrir dos Juegos Olímpicos, varios Mundiales de distintas disciplinas y algún que otro All-Star de la NBA con los Gasol. De Córdoba y sin acento.
• • 31/07/2019 19:50
  • Actualizado: 01/08/2019 00:00

El Real Madrid cosechó su primera victoria de la pretemporada, pero no disipó muchas dudas. Los chicos de Zidane continúan siendo un coladero en defensa, especialmente por la banda diestra, pese a que Benzema sostuvo al equipo en su primera gran noche de la temporada. El francés firmó un hat-trick ante un Fenerbahce que consiguió llegar al área madridista cuantas veces quiso y sin mucha oposición.

Los blancos, sin embargo, exhibieron una mayor pegada en un duelo a ocasión limpia que se decantó del lado blanco. El Madrid no exhibió un juego espectacular, pero los chispazos de talento de Vinicius y Benzema decantaron la balanza finalmente.

El partido comenzó con el Madrid exhibiendo su habitual empanada de pretemporada. Salvo en el partido contra el Tottenham, los blancos han encajado siempre un gol o varios en los cinco compromisos que suman los pupilos de Zidane. La costumbre no se perdió ante el Fenerbahce en una nueva exhibición de defensa poco concentrada.

Corría el minuto cinco, Garry Rodrigues recibía un balón en el flanco zurdo, dejaba sentado a Odriozola y luego anotaba con un disparo centrado ante el que Keylor pudo haber hecho mucho más. Cierto es que al tico le molestó un poco Marcelo, sobre el que pasó el balón por debajo de las piernas, pero esa parada empañó la exhibición realizada en el primer día de la Audi Cup.

El Madrid tenía que responder. Vinicius, Hazard, Isco y Benzema atesoran demasiado talento, aunque algunos de ellos estén lejos de máximo nivel. El brasileño deslumbró desde la derecha en su primera cabalgada dejando en bandeja un gol a Karim, quien no perdonó.

Los blancos, viendo que los turcos lo pasaban mal con la presión alta, se echaron la manta a la cabeza y presionaron con éxito creando múltiples ocasiones. Quedó demostrado que a Hazard todavía le falta creerse que debe terminar una jugada para hacer daño verdadero.

Karim empieza a enchufar

La conexión Benzema-Vinicius fluía como en los mejores días de la era Solari. Todo salía de las botas de ambos, incluso el origen del segundo gol. El brasileño sacaba una falta en la frontal muy peligrosa, Kroos la botó y Benzema remató de excelso cabezazo.

Parecía que venía una goleada blanca, pero nada más lejos de la realidad. A este Madrid le falta actitud defensiva y en cuanto sus rivales superan la primera línea de presión, éstos pueden llegar silbando al área. El caso del flanco diestro era especialmente sangrante y los turcos lo sabían.

En el minuto 35, Dirar entró sin un rival a 10 metros a la redonda para definir ante Keylor Navas tras un rebote en Odriozola. Es verdad que el Madrid ha recibido muchos goles extraños y de rebote, pero no es menos cierto que atrás falta contundencia para evitar tantos accidentes. El descanso era la mejor noticia posible para los de Zizou, totalmente aturdidos con el empate.

Zidane movió el banquillo en busca de soluciones y trabajo. Lucas Vázquez, que venía de recibir muchas críticas contra el Tottenham, se reivindicó poniendo un gran centro a Benzema para que el galo devolviese el dominio a los blancos en su primer hat-trick de la temporada. Karim, de momento, parece la única buena noticia de la pretemporada.

El Madrid, sin embargo, siguió empeñado en no cerrar el choque. Vinicius, en la segunda mitad en la izquierda, hizo una jugada maradoniana en la izquierda desbordando a varios rivales y regalando el gol a un Isco que la mandó fuera por milímetros. En la siguiente jugada, la pasividad defensiva volvió a pasar factura a los blancos permitiendo que Tufan encañonar desde 30 metros anotando un soberano golazo que Lunin casi saca de milagro.

Con el 3-3 en el minuto 60, Zidane decidió sacar todo el fondo de su armario. Mariano, en el primer balón que tocó, demostró su hambre disparando desde la frontal y encontrándose con una gran mano de Bayindir. El rechace, sin embargo, cayó en las botas de Nacho para poner otra vez a los blancos por delante.

El resto del encuentro fue una exhibición del portero turco deteniendo múltiples ocasiones a los delanteros blancos. Sólo Mariano fue capaz de tumbar la resistencia otomana con una contra en la que supo rematar el rechace tras un tiro de Lucas Vázquez que cayó en las botas del ariete catalán.

El Madrid pudo marcar más. Kubo volvió a dejar una gran impresión, aunque el brote verde es sin duda Benzema. Veremos si el francés encuentra la regularidad necesaria para liderar a un Madrid que sigue estando muy bajo en defensa. Otra vez encajó tres goles y van tres partidos de pretemporada así.