El Barça renuncia a la pantalla de 360 grados del Camp Nou porque «desvía la atención del público»

Siguen los recortes en el Barcelona y ahora hasta se escatima en la reforma del Camp Nou. La vicepresidente culé y portavoz Elena Fort anunció que el nuevo estadio no dispondrá de una pantalla de 360 grados, como sí tienen otros coliseos vanguardistas como el SoFi Stadium de Los Ángeles o el nuevo Santiago Bernabéu, al considerar que «desvía la atención del público» y que no «ven un retorno económico para ese coste tan elevado».

El presidente Joan Laporta auguró que tras la reforma del Camp Nou éste se convertiría en el mejor estadio del mundo, pero al renunciar a un elemento tan moderno como visual como un marcador de 360 grados sus opciones se reducen drásticamente. La gran novedad que este nuevo Camp Nou presenta es que las todas las localidades estarán techadas.

«No nos acaba de gustar como estaba planteado el tema de la pantalla. Era demasiado grande y desvía mucho la atención del público. Al menos cuando yo estuve en el SoFi Stadium vi el fútbol a través de la pantalla y no mirando el terreno de juego. Ese es el primer motivo, pero no el único. La inversión es tan grande que no había un retorno económico suficiente», argumentó Fort sobre la decisión.

A cambio el Barça pondrá tres pantallas grandes distribuidas en los fondos y en una tribuna y habrá mini anillos de publicidad de 360 grados entre el segundo y tercer anfiteatro. Del vídeo que el club azulgrana presentó sobre el proyecto a lo que en realidad va a quedar para la posteridad empieza a haber lagunas.

Elena Fort, en su entrevista con Mundo Deportivo, asegura que no ven un retorno posible a esta inversión pese a que los números son evidentes. Los Rams, dueños del SoFi Stadium, ingresaron sólo por anuncios publicitarios en su estadio 12 millones de dólares en un ejercicio.

El Camp Nou y la inversión

Hay que recordar que el Barcelona anunció a bombo y platillo el pasado mes de abril que había cerrado el acuerdo para la financiación de las obras del Camp Nou. El club obtuvo unos fondos de 1.450 millones de euros para toda la reforma a un interés del 5,5%, el doble de comisión que le costó al Real Madrid hacer su reforma en el Santiago Bernabéu.

Las obras están siendo llevadas a cabo por la constructora turca Limak y han generado polémica por las condiciones laborales de los empleados. El consorcio otomano ya ha recibido un millón de euros del Barça por ir adelantados un mes a los plazos establecidos para una obra que ha sufrido una importante modificación con el cambio en la pantalla de 360 grados.

En las previsiones azulgrana, se establece que el estadio dará al club 247 millones de euros anuales, más del doble de la cantidad facturada, por ejemplo, en la temporada 2018/19, el año previo a la pandemia. Para ello, el club espera que la ampliación hasta las 110.000 localidades tenga un importante impacto.

La final del Mundial

La no instalación de la pantalla de 360 grados en el Camp Nou puede facilitar la elección del Santiago Bernabéu como sede de la final del Mundial de España, Portugal y Marruecos de 2030. Hasta ahora había una competición entre los dos estadios más icónicos del fútbol español por ver quién obtendría la guinda al pastel del evento más importante de la FIFA.

Viendo las innovaciones que el Santiago Bernabéu brindará y la experiencia que supondrá para los aficionados parece que el Camp Nou tendrá complicado equiparse a ello. El Barça ha decidido escatimar en algunos elementos que cree que no tendrán retorno, pero que darían a su coliseo un aspecto más que imponente. Por lo pronto, el Madrid parece que está ganándoles por la mano la reforma del estadio.