Desde su origen hasta la actualidad, el mundo de la relojería ha experimentado una gran evolución, creando un universo propio que cada vez capta más adeptos. A diferencia de otros elementos del mundo del lujo, el paso del tiempo le aporta una revalorización que sólo se aplica en ciertas marcas. Rolex se ha convertido en un gran referente y ha creado modelos que han escrito sus páginas en la historia de la exclusividad, como el ejemplar denominado Rainbow.
Este icónico reloj se creó en la década de los 90, se le conoce por su exclusivo patrón de gemas que emulan un arcoíris y, durante muchos años, ha pertenecido a una colección privada. Cabe destacar que esta fue una creación bastante singular y el Rainbow Daytona marcó un punto de inflexión en la historia de la casa suiza. Aunque la casa de subastas aún no ha publicado las fotos oficiales, os mostramos el modelo de 2021, el cual alcanza casi medio millón de euros en reventa.
Esto pudo demostrar que la habilidad que poseen para dar vida relojes de alta joyería, mediante técnicas innovadoras de engaste de gemas, en la década de los 90 era una práctica que no se veía tanto. De hecho, en su momento de fabricación, a Rolex se le conocía por ser manufacturador de relojes estilo deportivo de lujo. Esto es algo que aporta un gran valor añadido al diseño.
Al ser el primer modelo fabricado en el mundo, esta rara avis es una de esas piezas que ha sido vista en ocasiones puntuales, puesto que fue adquirido de forma privada y pocas veces se ha expuesto delante de los focos. Ahora es el gran momento de los coleccionistas, puesto que el Rolex Daytona Rainbow saldrá a puja por la casa de subastas Phillips, ubicada en Ginebra, en la que ha surgido un gran debate.
Es complicado tasar un reloj tan exclusivo, ya que el paso de los años le ha atribuido un gran valor añadido y han tenido que tomar una decisión en común. Si nos paramos a pensar bien, hablamos del primer ejemplar que presenta el famoso patrón de gemas de arcoíris creado por el renombrado relojero suizo, Rolex, el cual ha servido como inspiración para diseños posteriores. En la actualidad, vemos como otras marcas como Audemars Piguet o Patek Phillipe han desarrollado sus propios diseños tomando este como guía.
Según afirmó Alexandre Ghotbi, jefe del área de relojería para Europa y Oriente Medio en Phillips, a Bloomberg, «este reloj es un gran acontecimiento». Y es verdad, puesto que muy pocos coleccionistas en el mundo saben de la existencia de esta pieza y, ahora que ha salido a la luz, se ha convertido en el deseo de muchos. Y es que, aunque la industria de la relojería se encuentra en un momento de estabilidad, viene de una gran explosión sobre la demanda de modelos raros y únicos. Muchos se preguntan el motivo y es muy simple: el descubrimiento de la revalorización que regala el tiempo a estas piezas suizas.
Según las estimaciones que ha publicado la casa de subastas, se espera que el precio final de venta supere los 3 millones de euros. Además, se sabe que Phillips ya vendió en mayo del año pasado un Rolex 6270 Cosmograph Daytona de oro de 1988 con esfera y bisel engastados con diamantes por casi cuatro millones de euros.
