Navidad y Embarazo: Consejos sobre lo que puedes y no puedes comer

Por fin podemos decir que hoy jueves 24 de diciembre, comienza ese periplo de celebraciones navideñas en las que la comida será protagonista. En el caso de vivir un embarazo durante este período, es importante cuidarse bien y sobre todo tener cuidado con los excesos navideños, por lo que queremos ofreceros algunos consejos sobre qué se puede comer y qué no si se está embarazada en Navidad.

Navidad y Embarazo: Lo importante es disfrutar cada momento

Este año 2020 ha sido realmente duro para todo el mundo y en el caso de estar embarazada seguramente la pandemia te habrá provocado incertidumbre e incluso algo de miedo. Ahora que estamos en Navidades es importante no «bajar la guardia» y aunque debes seguir las mismas pautas de higiene y seguridad, intenta vivir esta etapa de tu vida que además coincide con unas fechas tan especiales con optimismo, y con ilusión.

Vivir una navidad mientras se está embarazada es algo realmente especial. Todo parece más dulce y brillante, todo parece ser bonito y por ello, puede que sea también más factible el dejarse llevar con los grandes banquetes y en concreto, con comer demasiados dulces.

Debes llevar cuidado con lo que comes estos días, pero eso no quiere decir que debas privarte de todo o mucho menos, que no te puedas permitir algún que otro capricho. De hecho, será bueno seguir tus rutinas pero dentro del ambiente navideño y aunque este año puede que no vayamos a reunirnos con toda la familia, debes hacer que todos sean partícipes de esa ilusión que sientes por el hecho de estar embarazada. De hecho es siempre habitual que cuando hay una embarazada  y llega la Navidad, toda la familia se vuelca para cuidarla o para procurar que se sienta a gusto. No es que debas aprovecharte de ello, pero si este año te han dicho que mejor que no cocines por Navidad o que descanses y te ofrecen una tarde viendo una película mientras los demás lo preparan todo no pasará nada porque les hagas caso. Piensa que con un poco de suerte, las próximas Navidades ya tendrás a tu bebé y toda la atención será para él y para todos los regalos navideños que va a recibir.

Por otro lado, y dado que van a ser días de mucho comer y de mucha relajación, puede que no sea mala idea preparar la bolsa para acudir al hospital a dar a luz, en el caso de que tu embarazo esté ya muy avanzado o esté a punto de llegar a término en los próximos días o semanas.

Navidad durante el embarazo: que puedes comer y que debes evitar

Seguramente en la última visita que has hecho con tu ginecólogo, este ya te habrá advertido sobre todos los excesos navideños de estos días, como por ejemplo que no abuses de la grasa de la carne, que no comas demasiado turrón o que no te pases con el panettone,  especialmente si el tuyo es un embarazo en el que tienes o puede que tengas diabetes gestacional.

En este tipo de embarazo, es importante controlar el azúcar en sangre en todo momento, por lo que seguramente tendrás que seguir una «dieta especial» aconsejada por tu médico, pero en el caso de que no sea así y que tu embarazo vaya por buen camino, puedes comer de todo aunque siempre tomando ciertas precauciones y más con el azúcar, para el que nunca te debes pasar.

De hecho,  lo primero en lo que debes pensar es en el riesgo de toxoplasmosis, por lo que será bueno evitar por completo los embutidos, la carne y el pescado crudos, incluso si están marinados en limón o vinagre, los huevos crudos y las frutas y verduras crudas o si no se han lavado cuidadosamente con bicarbonato de sodio.

Por lo demás, el consejo en general es degustar todos los platos que quieras manteniendo pequeñas porciones que no tensen más el estómago, ya bajo presión debido a la presencia del feto más o menos voluminoso.

Cómo evitar los atracones navideños

Por otro lado debes tener en cuenta que son 6 días de celebración (y por tanto las comidas relativas): Nochebuena, Navidad, San Esteban (en el caso de vivir en Cataluña o Baleares), Nochevieja y Año Nuevo, de modo que aunque en estos días, comas un poco más de la cuenta, para el resto de días debes comer con las cantidades justas o habituales, aprovechando además para tomar mucha más verdura dado que durante las celebraciones es posible que no las tomes en gran cantidad.

También será bueno dividir el día en 5 comidas, evitando atracones durante el almuerzo y la cena. Está mal saltarse la merienda porque se quiere comer más en la cena, porque la finalidad de la merienda es precisamente no tener hambre para la próxima comida; por lo tanto, disfruta de meriendas saludables y ligeros, como un té de hierbas con galletas, una fruta o un yogur.

¿Y El brindis de Navidad? Ya sabes que durante el embarazo es mejor evitar el alcohol, de modo que si deseas brindar nada como beberse por ejemplo un nutritivo zumo de naranja.