Ciudadanos se lanza a enfrentar a Casado con Moreno Bonilla para evitar un adelanto como el de Mañueco

Ciudadanos ha trazado una línea de estrategia para conservar el mayor tiempo posible el único Gobierno autonómico que le queda, el que conforma en Andalucía junto al Partido Popular. Ese posicionamiento, que ya está implementado, pasa por erosionar la relación existente entre Génova y el PP andaluz, es decir, entre Pablo Casado y Teodoro García Egea, por un lado, y el presidente andaluz, Juanma Moreno Bonilla, y su equipo, por otro.

En esta operación, de la que ha tenido conocimiento OKDIARIO por fuentes internas de los naranjas, juega un papel clave el vicepresidente andaluz y consejero de Turismo, Regeneración, Justicia y Administración Local, Juan Marín, que acaba de ganar las primarias como candidato a la Junta imponiéndose al diputado autonómico Fran Carrillo.

Tanto Marín como la dirección nacional de Ciudadanos, a través de su presidenta Inés Arrimadas, salieron este lunes con el mismo argumentario de ataque frontal al líder del PP, Pablo Casado, tras el adelanto electoral anunciado por el jefe del Gobierno de Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco, a raíz de la pérdida de confianza en los que fueron sus socios naranjas hasta el día de ayer.

Para Arrimadas y Marín, que mantienen permanente contacto con Moreno Bonilla, su figura «no es la misma que la de Mañueco, ni se va a prestar a anunciar un adelanto electoral por orden de Génova», señalan las fuentes internas consultadas sobre el panorama que dibujan en privado ambos dirigentes naranjas.

«Buena relación»

Además, la dirección de Ciudadanos, según tales fuentes, incide en la «buena relación» que existe entre Juanma Moreno y el propio Marín, «muy diferente» a la que tenían Mañueco y Francisco Igea, ex vicepresidente de la Junta de Castilla y León.

A ello se une, señalan las fuentes consultadas, la cuestión de las listas conjuntas a las próximas elecciones, que Génova rechaza de plano, mientras el PP andaluz no termina de cerrar la puerta con la misma claridad, según el análisis que hacen en el cuartel general de los naranjas. El equipo de Arrimadas subraya que «Moreno Bonilla no quiere gobernar con Vox», lo que, su juicio, retrasa el adelanto hasta que sea ya técnico, como insiste el PP andaluz, esto es, tras la conclusión del próximo periodo de sesiones a mediados de 2022.

«Sánchez y Casado»

En este contexto, se enmarcan las declaraciones realizadas por Marín este lunes en Granada tras conocerse el adelanto electoral en Castilla y León. «Las políticas partidistas del señor Sánchez y el señor Casado están llevando al fracaso a España. Con eso, respondo a esta situación. A los españoles les interesa la gestión de un Gobierno serio como el de Juanma Moreno y el mío. Estoy completamente convencido de que vamos a agotar la legislatura», afirmó el vicepresidente de la Junta

«Confío en la palabra del presidente como él confía en la mía, ponemos por encima de cualquier cosa a los andaluces. Ni él ni yo vamos a convocar elecciones que perjudiquen a los andaluces», añadió Marín, hablando así de su socio y él mismo como si fuesen un único partido. Es decir, como si Moreno Bonilla, con la potestad para disolver el Parlamento, no fuese del PP.

«Estoy seguro de que Juanma y yo vamos a tomar decisiones por encima de las siglas para que Andalucía siga creciendo (…) Ése es el objetivo, el señor Casado se equivoca, el señor García Egea se equivoca. Si quieren poner a Castilla y León en manos de la ultraderecha que lo expliquen»,  agregó el dirigente naranja contra Génova.

Es más, en esta escalada de oposición a Casado, Marín llegó a compararlo con Pedro Sánchez tras el adelanto de Mañueco en Castilla y León. «No es el camino, había un Gobierno leal, estable y esta mañana por twitter se ha enterado de que era cesado. Esa forma de hacer política, que ya lo hizo Sánchez también. Me lleva a pensar que entre Sánchez y Casado no hay diferencias, y que el sillón está por encima. Ni Juanma ni yo lo vamos a hacer», recalcó.