El mejor vino de España y una historia de superación: Ramón do Casar y la vuelta a sus orígenes

A menudo, los sueños de las personas a las que queremos terminan convirtiéndose en nuestros propios sueños. Este es el germen del gran proyecto en el que se ha convertido Ramón do Casar, la bodega de Orense con Denominación de Origen Ribeiro –la segunda D.O. más antigua de España–, ubicada a orillas del río Miño, galardonada en 2022 con el premio al Mejor Vino del Año por el Ministerio de Agricultura. 

El sueño de tener una gran bodega, de poseer un lugar en la tierra de Orense donde relanzar el Ribeiro, tan desconocido a veces frente a otras D.O., era de Ramón González, un gallego que dejó España a mediados del S. XX con el fin de buscar fortuna en otras tierras al otro lado del océano Atlántico. Partió de Galicia para hacer las Américas, igual que miles de sus paisanos. Y años después, con el apoyo de Banco Santander, sus sueños se hicieron realidad.

Emigrar con la vista puesta en el terruño

Recaló en Venezuela, el país donde fue acogido y donde montó una panadería gracias a la cual ganaría algunos duros con los que mantener a su familia y, además, poder comprar algunas fincas y viñedos en Galicia. Y es que Ramón jamás apartó la mirada de su tierra natal, soñando con esos viñedos. Hoy la bodega Ramón do Casar tiene un total de 25 hectáreas y una planta de 1.000 m2 especializada en vinos blancos, dotada con la última tecnología y capitaneada por los tres hijos de González: Ramón, Javier y Etelvino González Sabucedo.

Y para tener presente a su padre Ramón, y a los emigrantes gallegos que salieron hacia América, todas las etiquetas de las cinco variedades de vino blanco de Ramón do Casar cuentan con imágenes de Alberto Martí, el conocidísimo fotógrafo que posó su mirada en la emigración gallega.

Un sueño y un gran vino sostenible

«La tierra es una parte importantísima para nosotros. De alguna forma, es como volver atrás, regresar al espacio donde estuvimos en nuestra niñez. Mi padre tenía el sueño de las fincas, las viñas, la bodega…, nosotros teníamos ya el sueño de un gran vino», explica Ramón. Es a partir del año 2000, hace más de dos décadas, cuando los tres hermanos tomaron las riendas del proyecto y comenzaron a dar forma a lo que hoy es Ramón do Casar, convirtiendo todas las fincas en viñedos con los que poder generar 180 toneladas anuales de las variedades Treixadura, Albariño y Godello.

Bodega Ramón do Casar ha confiado para la elaboración de su Ribeiro en «un mago del vino», que es como define Javier a Pablo Estévez, el reconocido y prestigioso enólogo que trabaja con ellos desde el principio. «Siempre digo que para hacer un gran vino, primero hay que hacer una gran viticultura y llegar a bodega con una gran uva. Los tres hermanos contactaron conmigo y me contaron su idea, que era la de construir una buena bodega en la que poder elaborar los mejores vinos blancos posibles», explica Estévez.

Una elaboración que, además, está basada en la sostenibilidad y la economía circular, dos conceptos muy presentes en la estrategia de la bodega. Llevan a cabo una producción integrada, la cual permite actuar sobre el terreno, sobre la planta, con unos altos estándares de cuidado medioambiental.

Tierra que vuelve a la tierra. Por ello, Javier explica que la bodega «no tiene apenas residuos al elaborar el vino». «Por un lado, están los raspones, que los tratamos para luego introducir en el viñedo como abono. Y, por otro lado, tenemos lo que son la pepita y la piel de la uva, que la vendemos a una destilería para la elaboración de orujos de Galicia», añade.

En todo este camino, los hermanos González Sabudedo han contado con un buen compañero de viaje como es Banco Santander, uno de los grandes aliados de los emprendedores del mundo agro en nuestro país. Javier cuenta que a la entidad le gustó mucho el proyecto y que «siempre hemos contado con su apoyo y hemos podido conseguir tener todos los viñedos que tenemos hoy».

Tras la experiencia de esta alianza, Javier tiene claro que también estará presente en sus planes de expansión internacional y ampliación de la bodega Ramón do Casar. «Hemos contado con la ayuda de Banco Santander desde el principio y esperamos que en el futuro podamos contar de nuevo con la mano de nuestro banco», concluye uno de los hermanos propietarios.

4.200 millones de euros para cumplir los sueños del mundo agro

Ramón do Casar es uno de los clientes del sector de la agroalimentación a los que Banco Santander ha apoyado en estos años. Sólo en 2022, la entidad ha apoyado al mundo agro aportando más de 4.200 millones de euros de financiación a los más de 425.000 clientes agricultores y ganaderos con los que cuenta en España, lo que representa un incremento del 11% con respecto al año anterior. Pero también tienen otras iniciativas con las que ayudar al sector como la contratación de los Anticipos Cosecha, el Préstamo I+D+I Agro o los préstamos a largo plazo para la transformación de fincas a cultivos más rentables, con foco en la digitalización y la sostenibilidad, son algunos de los productos más demandados.

Recientemente, además, ha puesto en marcha el Préstamo Sequía, el cual busca paliar la compleja situación de sequía que vive el campo español, así como poder hacer frente a otras adversidades climáticas, como las originadas por las inundaciones. Ya se ha preconcedido este préstamo a más de 100.000 clientes de Banco Santander que podrán contar con asesoramiento personalizado por parte de los especialistas agro de la entidad para que puedan conocer todos los detalles y líneas disponibles, y poder impulsar así su negocio.

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