Las prótesis de cadera alcanzarán 1,7 millones en Europa y la ciencia debe evitar las infecciones

El próximo año se estima que en Europa se implantarán 1,7 millones de prótesis de cadera, prácticamente medio millón más de las intervenciones llevadas a cabo en 2018. Así lo ha puesto de manifiesto la prestigiosa investigadora, científica y vicepresidenta de la Real Academia de Ingeniería (RAI), María Vallet, en el acto celebrado en la sede de esta institución -integrada en el Instituto de España- en colaboración con RTVE para conmemorar en Día Internacional de la Mujer y la Niña en la Ciencia.

En el encuentro, presidido por el presidente de la RAI, Jaime Domínguez, participaron representantes de ambos organismos, así como de las cuatro cátedras universitarias creadas por el ente público de RTVE: Universidad de Sevilla, Universidad Autónoma de Barcelona, Granada y Jaume I de Castellón. De esta manera, se abordaron distintos temas relacionados con la Innovación y la Ciencia y en las que se trata de promover la incorporación de las mujeres en los equipos de investigación.

Durante su intervención, María Vallet, animó de forma especial a los cerca de 80 alumnos y alumnas del colegio Sagrado Corazón de Madrid, a estudiar carreras relacionadas con la Ciencia y la Ingeniería, destacando que el eje de su investigación se centraba en hacer «piezas de repuesto para el cuerpo humano”, pero mañana -continuó- «se hará ingeniería de tejidos, y espero que para ello, se apunten muchos de vosotros y hacer futuro. Pasaremos de hacer esas piezas, que es algo que no funciona en nuestro cuerpo humano a repararlas y regenerarlas, que es el paso que debéis dar vosotros». Por otra parte, Vallet añadió que en este punto no entrará sólo la ingeniería, que es un campo multidisciplinar, sino que «tendremos que trabajar en equipo con biólogos, físicos, químicos, técnicos, etc», argumentó.

La investigadora incidió en que se debe tener en cuenta que también surgirán problemas y que, por lo tanto, se tendrán que buscar soluciones. Así, ofreció algunas cifras relevantes en su argumentación, como por ejemplo, que las prótesis que se ponen en la actualidad «hay un porcentaje que oscila entre el 0,2 y el 2% que tienen riesgo de infección, y cuando ello sucede es una mala noticia tanto para el paciente como para el médico». Y aquí, quienes trabajan en este mundo de la ingeniería «tienen que trabajar para ver cómo se puede mejorar esta situación y evitar rechazos o infecciones».

Casi 24.000 afectados y 1.700 millones de coste

Lo cierto es que estas prótesis que se pueden infectar afectan a miles de personas, ya que el número de las que se implantan aumentan cada año y hay más riesgos. En Europa, en el año 2018, se implantaron 1,2 millones de prótesis de cadera, «estimándose un valor de 1.700 millones para el año 2025». Esto supondría unos 24.000 pacientes afectados por la infección de esas prótesis.

Cuando se diagnostica la infección en una prótesis, el tratamiento consiste en someter al paciente a la administración sistémica de antibióticos, que muchas veces conlleva largas estancias hospitalarias, y en la mayoría de los casos es necesario llevar a cabo nuevas cirugías e, incluso, el reemplazo completo de la prótesis. En el peor de los escenarios «se necesitará la amputación de la extremidad afectada y en el 7% de los casos de infección se llega a la muerte del paciente», afirmó María Vallet.

La ingeniería como valor social

Por su parte, Jaime Domínguez, presidente de la RAI, destacó el valor social de la ingeniería, ya que con ella «se puede ayudar a los demás y permite mejorar la calidad de vida de la sociedad», a la vez que descartó que esos estudios estén reservados a la «élite intelectual». Cualquier persona con un coeficiente intelectual medio puede estudiar ingeniería, añadió. «Se trata de querer, y si se quiere, se puede hacer».

La directora de gabinete de la Presidencia de la Corporación RTVE, Verónica Ollé, destacó los programas de Impulsa Visión que realiza el ente público para, entre otros objetivos, promover la captación de talentos y de investigación. Y, dirigiéndose a los alumnos y alumnas presentes en el acto, les animó a estudiar carreras científicas.