Coronavirus: cuidado con las mascarillas FFP2 falsas

El coronavirus está cambiando muchas cosas en todo el mundo, la ‘antigua’ normalidad ha sido sustituida por una completamente renovada. Llena de nuevos hábitos, la mayoría de los cuales han tenido que adaptarse de manera rápida y no siempre con el beneplácito de las personas. Una de las medidas preventivas aplicadas en buena parte del planeta es el uso de las mascarillas. Esto ha permitido a sus fabricantes aumentar considerablemente los números de ventas. Por supuesto que la ‘piratería’ no podía quedarse atrás, por lo que ahora hay que estar alertas frente a la invasión de mascarillas FFP2 falsas.

¿Por qué usar estas mascarillas?

Antes de la pandemia, estos productos estaban dirigidos exclusivamente al mercado de los trabajadores de la salud. Su efectividad para proteger a este este personal frente a los virus y las bacterias, a los que por sus labores cotidianas están frecuentemente expuestos, no está en discusión.

Con el aumento de los casos por Covid-19, rápidamente se convirtieron en las mascarillas más buscadas, principalmente el modelo KN 95. Entre otras cosas, porque han demostrado una tasa de hasta el 95% de éxito para bloquear los aerosoles expulsados por las personas al hablar o toser. Hay que recordar que esta es la vía considerada por la mayoría de los especialistas como la principal causa de contagio.

Lamentablemente, cada vez que se genera una crisis, muchas personas sin escrúpulos solo se preocupan en conseguir dinero a cualquier precio. Para evitar ser víctimas de estos engaños, hay que tener en cuenta los siguientes tips importantes a tener en cuenta al momento de adquirir estos protectores faciales.

Cómo reconocer las mascarillas FFP2 Falsas

Además de adquirirlas en establecimientos confiables, para reconocer las mascarillas FFP2 solo hay que revisar con cuidado el empaque antes de proceder a la compra. Lo primero que debe identificarse es si se trata de un producto de un solo uso o si por el contrario es reutilizable. Cuando se trate del primer caso incluirán las siglas NR (no reutilizable); en caso contrario solo se leerá la letra R (reutilizable).

De forma explícita debe aclarar que se trata de un producto homologado por la Unión Europea, según la directiva 2016/425, junto la norma EN 149:2001+A1:2009. Por último, será necesario incluir el nombre de la compañía responsable de la fabricación del protector, junto con la Marca CE. Seguido inmediatamente por cuatro cifras que identifican al organismo que supervisó y aprobó el proceso de producción.

Protección y sentido común

A la mayoría de la población todavía le queda un camino que recorrer sin la vacuna. En donde las medidas preventivas serán las únicas armas disponibles para aminorar el número de contagios. Lavarse las manos con agua y jabón frecuentemente, evitar aglomeraciones, especialmente en espacios cerrados. Lo mismo que mantener una distancia de al menos 1.50 mts entre personas.

También es necesario usar las mascarillas correctamente. Deben cubrir desde la barbilla hasta la nariz. De esta forma, conseguiremos una eficaz protección frente al virus. No olvidemos, además de esto, mantener la distancia de seguridad con respecto a otras personas y lavarlos las manos con gel hidroalcohólico con frecuencia.