Electricidad

Iberdrola avanza en su complejo hidroeléctrico del Tâmega con una turbina más

La central portuguesa entrará en operación comercial a finales de marzo de 2024

Iberdrola Tâmega
El Complejo Hidroeléctrico de Tâmega está formado por tres centrales

Iberdrola ha anunciado un avance más en la puesta en marcha del Complejo Hidroeléctrico del Tâmega en Portugal al conectar con éxito a la red eléctrica una de las dos turbinas de la Central Hidroeléctrica del Alto Tâmega, la última de las turbinas del Complejo en entrar en funcionamiento.

El Complejo Hidroeléctrico de Tâmega está formado por tres centrales: la Central Hidroeléctrica de Alto Tâmega, con una capacidad instalada de 160 MW, la Central de Almacenamiento por Bombeo de Gouvães (880 MW) y la Central de Daivões (118 MW), estas dos últimas en funcionamiento desde 2022.

El Sistema de Electroproducción Tâmega es uno de los mayores proyectos hidroeléctricos realizados en Europa en los últimos 25 años según informan desde la compañía. Este complejo está compuesto por tres represas y tres centrales hidroeléctricas. Dos de las presas están ubicadas en el río Tâmega (Daivões y Alto Tâmega) y la tercera en el río Torno (Gouvães).

Conexión en marzo de 2024

La Central del Alto Tâmega está situada al pie de la Presa del Alto Tâmega, una gran presa de bóveda de doble curvatura, de 105 metros de altura, con 220.000 metros cúbicos de hormigón y 335 metros de longitud de coronación, que se ha convertido en la quinta más alta de Portugal.

A raíz de la conexión de esta primera turbina a la red, se tiene previsto realizar la puesta en marcha de la segunda, cuya conexión a la red está prevista para febrero de 2024. A finales de marzo de 2024, la central estará en operación comercial, con todo el Complejo Hidroeléctrico de Tâmega funcionando con una capacidad total instalada de 1.158 MW.

Desde Iberdrola se destaca que en «un contexto en el que la capacidad de almacenamiento es clave para permitir un sistema eléctrico descarbonizado, maximizar la producción de energía renovable y garantizar su integración en el sistema, el Complejo Hidroeléctrico de Tâmega ha permitido aumentar en un 33% la capacidad de almacenamiento hidroeléctrico de Portugal».

Fuentes renovables en Portugal

Este aumento de potencia representó un incremento de más del 60% en el volumen de energía almacenada por bombeo en 2023 en comparación con 2021, afirma Rafael Chacon Llorente, director del Proyecto del Complejo.

Dado que el almacenamiento hidroeléctrico es actualmente la única tecnología capaz de acopiar electricidad de forma masiva y eficiente, este Complejo es capaz de aprovechar al máximo la energía generada por el viento y el sol, compensando los periodos en los que el sol no brilla y el viento no hace girar las palas de los aerogeneradores.

Portugal obtiene más del 60% de su electricidad de fuentes renovables, con el objetivo de alcanzar el 85% en 2030. Con el crecimiento de las renovables, cada vez más, cuando el sol brilla y el viento es fuerte, la producción de las centrales eólicas y solares supera las necesidades del sistema, que, al no poder ser consumida ni gestionada por el sistema, se perdería si no se almacenara bombeando agua, sobre todo en el embalse de Gouvães, que podría poner en marcha las turbinas para producir energía cuando el sistema lo necesitara.

Una iniciativa histórica

Desde Iberdrola destacan que el Complejo Hidroeléctrico de Tâmega es una de las mayores iniciativas energéticas de la historia de Portugal, con una inversión total de más de 1.500 millones de euros y una capacidad instalada de 1.158 MW y una reserva de energía de 40 millones de kWh, equivalente a la energía consumida por 11 millones de personas durante 24 horas en sus hogares.

Otros de los puntos de interés del proyecto de Tâmega es el de las emisiones que dejará de lanzar al aire 1,2 millones de toneladas de CO2 anuales y diversificará las fuentes de producción, y que, también, evitará la importación de más de 160.000 toneladas de petróleo al año.

En cuanto al impacto socioeconómico, la iniciativa fomenta la actividad económica y el empleo en la región, ya que durante toda la fase de construcción se estima que se han generado hasta 3.500 puestos de trabajo directos y 10.000 indirectos, el 20 % de los cuales proviene de los municipios vecinos, a través de más de 100 proveedores, 75 de ellos portugueses.