Las multas puestas en el extranjero ya llegan a España
Se acabó el cachondeo. Eso han debido pensar las autoridades de los diferentes países de la Unión Europea. Hasta ahora, todos sabíamos que si conducíamos fuera de nuestras fronteras teníamos cierta ‘manga ancha’ a la hora de pisar el acelerador. Si nos pillaba cualquier radar y no éramos detenidos en el momento, la multa nunca llegaba y nos ahorrábamos su coste.
Se acabó correr en el extranjero
Desde este año, los conductores que sean multados por exceso de velocidad -y cualquier tipo de infracción- en cualquier país de la Unión Europea comenzarán a recibir las multas en casa como si hubiesen sido sancionados en España. Al menos de esto nos advierte la empresa ALD Automotive, dedicada al alquiler de vehículos a largo plazo.
Esta empresa confirma que desde el pasado mes de mayo ha comenzado a recibir sanciones procedentes de Francia de vehículos que habían sido alquilados a conductores de otros países.
De esta forma se hace vital conocer el reglamento de circulación particular de cada país cuando nos toque ponernos al volante en carreteras que no son las nuestras, así como las costumbres de los conductores autóctonos. No en todos los países se circula de la misma forma. Según ALD Automotive, tampoco está de más aprender el vocabulario básico del país por si en algún momento nos para la policía o utilizar navegadores siempre que podamos, ya que te irán indicando, además del camino a seguir, los límites de velocidad de cada vía. Aunque, por si acaso, en la siguiente página de este artículo vamos a repasar las limitaciones existentes en los principales países de la Unión Europea.
Los límites de velocidad en los principales países europeos
- Alemania: las autopistas alemanas carecen de límites de velocidad, aunque hay zonas que si están limitadas por alguna razón -obras, cercanía de una incorporación, etc-. En zonas interurbanas, la velocidad máxima es de 100 km/h, mientras que en ciudades y pueblos el límite desciende a 50 km/h.
- Italia: en determinados tramos de las autopistas transalpinas se puede circular a 150 km/h, aunque lo normal es encontrar limitaciones de 130. Las vías interurbanas y urbanas se encuentran limitadas a 110 y 50 km/h respectivamente.
- Francia: en el caso de las autopistas francesas, el límite de velocidad está situado en 130 km/h, aunque éste desciende 20 km/h si llueve. En carreteras convencionales la velocidad máxima permitida es de 90 km/h, mientras que en ciudad hablamos de 50 km/h.
- Gran Bretaña: los ingleses, tan especiales ellos conduciendo al revés, también lo son a la hora de poner los límites de velocidad. Es lo que tiene medir este parámetro en millas por hora, aunque nosotros te vamos a ‘traducir’ las cifras a nuestras medidas. En autovías estamos hablando de una velocidad máxima de 112 km/h, en vías secundarias de 96 km/h y en poblado, de 48 km/h.
- Holanda: el país de los tulipanes cuenta con tramos de autopista donde se puede circular a 130 km/h, aunque lo normal es que el límite sea de 120. En vías secundarias el top de velocidad es de 80 km/h, mientras que en ciudades y pueblos éste se sitúa en 50 km/h.