Malas noticias de la DGT: adiós a la renovación del carnet de conducir en 2025
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Algo que es prioritario para la DGT es la seguridad, por lo que cada día ponen un mayor empeño en implementar diversas medidas y soluciones de cara a que mejoren las cifras de siniestralidad que se producen en la red viaria de nuestro país. Debemos saber que hace poco fueron aprobadas medidas de lo más importantes para saber si los conductores, con independencia de la edad o de la experiencia, cuentan con aptitud para poder conducir con seguridad, tanto para ellos como otros usuarios de la vía. No debemos olvidarnos que la conducción es una acción que precisa de importante responsabilidad, condiciones físicas, mentales y destreza. La seguridad nuestra y la de los demás dependerá de poder cumplir de manera estricta con las normas de tráfico y los parámetros que indicamos anteriormente.
La renovación del carnet de conducir para 2025
En base a los que hemos dicho antes, la renovación del permiso de conducir para 2025 o si queremos sacarnos el carnet por vez primera va a ser algo bastante más estricto de lo que era hasta ahora. No hablamos solo de cambios en las pruebas teóricas o prácticas para su obtención, sino al estado de salud en el que se encontrará la persona que lo va a solicitar. Como dijimos antes, adquiere gran importancia saber que dicha medida no afectará a ningún grupo en concreto de conductores y que tampoco va a estar relacionado con la edad que tengan los conductores, sino al estado en el que se encuentran a nivel mental y físico. Hay que pensar que hay una serie de patologías que suelen producirse con mayor probabilidad en la tercera edad, pero cuando algún conductor las llega a padecer en edad más tempranas, de la misma forma estará incapacitado para poder conducir. Los análisis médicos van a tener mayor rigurosidad y no se les va a renovar la licencia, tanto temporal como de manera permanente, a aquellas personas solicitantes que tengan algunas enfermedades o se encuentren recibiendo un tratamiento médico en concreto que termina afectando en mayor o medida la concentración cuando llegue el momento de conducir.
En este sentido se va a valorar el historial médico por parte de los pacientes, destacando que en cada caso se debe tomar y analizar de manera personalizada, puesto que de la misma enfermedad es posible que haya grados distintos en cuanto a afectación o tratamientos que puedan afectar a las personas.
Debemos destacar que, aunque se tengan enfermedades o diversas patologías, no va a ser preciso que se tenga que revocar el permiso de conducir.
Hay enfermedades que son totalmente incompatibles con conducir, además de los medicamentos que se van a recetar para el tratamiento de estas. Por todo ello, los que las padecen terminan siendo consideradas “no aptas” para realizar la conducción de vehículos.
Solo hay una manera para renovar un conductor el carnet de conducir, o sacárselo por vez primera, incluso aunque padezca alguna enfermedad que se compartan, teniendo un informe médico en el que se concrete y certifique que pese a tener esta enfermedad, la persona se encuentre en condiciones perfectas para poder conducir.
¿Cuáles son las patologías que son incompatibles con conducir?
En tráfico proporcionaron una gran lista en la que podemos ver 35 enfermedades que son incompatibles para poder conducir. Hablamos de que todo va a depender del nivel en cuanto a afectación y del tratamiento que se reciba.
Entre las 35 enfermedades que se ha encargado de especificar la DGT podemos hablar de algunas que son de lo más habituales, como aquellas que afectan al aparato digestivo, endocrino y respiratorio, además de la depresión, el Alzheimer, demencias, ansiedad, patologías degenerativas, neurológicas, paratiroides, marcapasos, parkinson, trasplantes renales, etc.
Tanto las patologías como los propios tratamientos acaban por afectar a la propia conducción de aquellos que las padecen y en la práctica, cada uno de los casos es posible evaluarlo individualmente por los profesionales para saber si es posible o no conducir. Hablamos de saber si la persona puede o no conducir de manera segura y sin que se ponga en riesgo la integridad y la de los otros.
Como ves, desde la DGT se han tomado todo este tipo de medidas muy en serio, todo ello estando encaminado a una reducción importante del número de accidentes que se producen por padecer patologías que hacen que sea más complicado conducir.
Así que ya sabes, este tema hay que tomárselo bastante en serio, porque de ello va a depender el que tanto tú como los otros conductores puedan tener mayor seguridad y que todo el mundo que se ponga al volante cuente con las condiciones necesarias para poder conducir de forma segura.
Es un precio que hay que pagar, pero del que todos salimos beneficiados, sin duda.