5 cosas que dañan la pintura de tu coche y no sabías
¿Sabes cómo cuidar correctamente la pintura de tu coche para que ésta dure impoluta la mayor parte del tiempo? Seguramente sí, pero existen una serie de conductas o situaciones que, sin darnos cuenta, pueden dañarla. Vamos a hacer un repaso de las cinco más comunes con la ayuda de Certifiedfirst, la red de talleres especializados en chapa y pintura.
Lavar el coche está bien, pero con matices
Lavar nuestro coche de forma regular -una vez a la semana sería lo correcto- está totalmente recomendado, pero hay que tener ciertas precauciones con ello. Por ejemplo, debes evitar los túneles de rodillo más antiguos, ya que pueden provocarte arañazos. Es mejor que te decantes por aquellos que tienen los limpiadores de goma. Aunque lo ideal de verdad es lavar el coche a mano, siempre teniendo la precaución de no utilizar productos de limpieza muy agresivos que se coman el color. Ojo en verano también, ya que si lavas la carrocería cuando ésta está muy caliente, el jabón puede dejar marcas si no lo aclaras bien.
A ver dónde aparcas
Si dejas aparcado el coche al sol durante un largo periodo de tiempo, especialmente en verano, la pintura de la carrocería puede verse afectada. La exposición prolongada a la luz solar hace que la pintura se blanquee, especialmente con algunos colores. Además, debemos evitar que el coche se seque al sol nada más lavarlo.
Si dejas el coche debajo de un árbol…
Dejar el coche estacionado debajo de un árbol, aunque sea para cinco minutos, es un error de los graves. La propia resina que estos generan o los posibles excrementos de pájaro que puedan caer sobre la pintura son especialmente dañinos.
La sal y la arena, fatales para la pintura
Circular en carreteras que han sido tratadas con sal durante el invierno o que tengan arena -especialmente común en verano con las visitas a la playa- hace que nuestra pintura entre en contacto con dos agentes especialmente corrosivos. Si has pasado por una situación así, lava el coche lo antes posible.
Atención al aparcar
Parece una obviedad, pero tener cuidado al aparcar es uno de los métodos más eficaces para mantener la pintura de tu coche impoluta. Los impactos que se producen durante estas maniobras no son especialmente fuertes, pero sí suficientes como para que la pintura pueda saltar dándonos un disgusto.
