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Increíble pero cierto: un cazador anciano adopta un perro y ahora le quieren multar con 10.000 euros

  • Ana López Vera
  • Máster en Periodismo Deportivo. Pasé por medios como Diario AS y ABC de Sevilla. También colaboré con la Real Federación de Fútbol Andaluza.

Lo que debía ser una historia de compasión casi acaba en un conflicto legal. Un cazador veterano de 74 años, natural de Rodonyà (Tarragona), decidió acoger a una cachorra mestiza de braco alemán de apenas 3 meses. El animal, entregado por una conocida valenciana, iba a ser llevado al veterinario ese mismo día para ser identificado y vacunado.

No obstante, una actuación inesperada del Seprona derivó en una propuesta de sanción de hasta 10.000 euros. Este caso ha encendido el debate sobre la aplicación estricta de la Ley de Bienestar Animal.

Por qué casi multan a un cazador en Tarragona por adoptar un perro

Según la revista Jara y Sedal, el 24 de octubre de 2023, mientras atendía su restaurante, el hombre tenía a la perrita en un transportín, lista para acudir al veterinario. Fue entonces cuando agentes del Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) de la Guardia Civil irrumpieron en el local. Preguntaron por el animal y su situación legal.

A pesar de mostrar una cita veterinaria programada, los agentes iniciaron un procedimiento sancionador.

Antonio Martínez Navas, aficionado a la caza mayor y menor, explicó su desconcierto ante la situación: «Nunca pensé que por intentar darle una vida mejor a un perro pudiera acabar así», declaró.

¿Qué infracciones recoge la Ley de Bienestar Animal?

La propuesta de multa se basa en la Ley 7/2023, de protección de los derechos y el bienestar de los animales, en vigor desde el 29 de septiembre de ese año. Según la denuncia recibida, se le atribuyen dos infracciones leves:

El hombre explicó que la situación era provisional y que su intención era legalizar la adopción en cuestión de horas, pero no fue suficiente para evitar la denuncia.

Cuánto puede costar una infracción leve de la nueva ley animal

Aunque se trata de infracciones leves, la sanción propuesta alcanza el máximo contemplado por la ley: 10.000 euros. El rango para este tipo de faltas va desde los 500 hasta los 10.000 euros, dependiendo de la gravedad del caso según criterio de la administración.

En paralelo, las sanciones por infracciones graves pueden llegar a los 50.000 euros, y las muy graves, hasta los 200.000. Esto ha generado preocupación entre ciudadanos que, como este cazador, actúan de buena fe pero desconocen aspectos clave de la legislación actual.

El caso de este cazador evidencia una tensión creciente entre el objetivo de proteger a los animales y la complejidad legal que eso puede suponer. El caso del cazador de Tarragona demuestra cómo la entrada en vigor de la Ley de Bienestar Animal ha generado situaciones sancionables incluso en procesos de adopción en curso.

A pesar de haber concertado una cita veterinaria, la ausencia de identificación previa y el uso de un transportín derivaron en una propuesta de multa.