Sergi Arola nos descubre su nueva vida en Chile

La vida del cocinero Sergi Arola ha cambiado. Dio un giro desde el momento en el que aceptó el proyecto culinario que se le presentaba desde fuera de España: ser miembro del jurado de ‘MasterChef Chile’. Le definen como uno de los más exigentes y es que, cuando se pide calidad en la cocina, hay que ser severo. Los motivos de este viaje podrían ser sus problemas económicos sumados a los sentimentales, pues se cerró su restaurante debido a sus deudas con Hacienda y además, se rompió su relación con la actriz y presentadora Silvia Fominaya. 

LOOK se ha puesto en contacto con Sergi para que nos contara como está siendo su experiencia. “Estoy muy feliz. Me llevaban pidiendo cuatro años que formara parte de este proyecto, pero por temas profesionales no podía, ahora era el momento de hacer este break”, dice. Le apetecía hacer algo distinto, por lo que en noviembre decidió hacer las maletas. No sabe aún si esas maletas estarán allí mucho tiempo o será algo puntual: “No sé hasta cuando me quedaré aquí. Igual estoy temporadas en Chile y temporadas en España”.

Sergi está encantado al estar rodeado de gente que le quiere y que aprecia su trabajo y, por encima de todo, se lleva fenomenal con todo el equipo.  Los chilenos le han recibido con los brazos abiertos, algo que ya hicieron cuando abrió un restaurante hace seis años en Santiago de Chile. Eso sí, siente añoranza por lo que dejó en España “echo mucho de menos a mi familia y a la persona que quiero”.

Se refiere a Silvia Fominaya, con la que rompió hace unos meses. El cocinero siempre ha mantenido acordarse de ella y confirma que, a día de hoy, sigue sucediéndole: “la echo de menos cada puñetero segundo del día. Ella sabe dónde me tiene, la tengo mucho cariño”. Se desconoce si en el futuro esta relación volverá a retomarse, de momento, él no tiene pareja aunque “hay una persona especial que es Silvia. Siempre lo será”. Tienen una buena relación como amigos pero actualmente su ex, tiene la cabeza en otros temas. Se encuentra inmersa en varios juicios con su exmarido al que denunció por malos tratos siendo el propio Sergi el que ha querido manifestarse sobre esta difícil situación»no le deseo a ninguna mujer lo que está pasando Silvia».

Respecto al cierre de su restaurante en Madrid, confiesa que echar el cerrojo no fue suficiente “todavía hay procesos judiciales pendientes”. El ganador de dos estrellas Michelín, echa la vista atrás para recordar el momento en el que tuvo que cerrar una etapa que duró 20 años “siempre he trabajado y peleado. Hay que reponerse a las adversidades y buscarse la vida”. Pase lo que pase y llueva o truene, Sergi Arola mirará hacia adelante, ya sea en Chile o España.