Cristina Pedroche desvela el origen de su polémico vestido de las Campanadas
Cristina Pedroche ha regresado al trabajo tras unas campanadas en las que ha vuelto a ser protagonista gracias a un vestido joya del que ha desvelado todos los secretos.
Pase lo que pase durante los meses del año hay una celebración que permanece inamovible y que consigue sacar una sonrisa pese a todo: la Nochevieja. Un año más, Cristina Pedroche ha sido una de las encargadas en dar la bienvenida al nuevo año, una cita muy especial para ella en la que se esfuerza por deslumbrar. Más allá de pronunciar un discurso con el que la de Vallecas busca concienciar a todos los que sintonizan su cadena, quiere sorprender con el atuendo que lleva puesto. Este año no ha sido diferente y Cristina no ha dejado indiferente a nadie, convirtiéndose -sin olvidar a Ana Obregón- en una de las reinas de la noche.
Este lunes 4 de enero Cristina ha regreso al trabajo, a Zapeando, donde ha hecho balance de la noche junto a sus compañeros. «Estoy bien, porque estoy intentando no leer nada», ha confesado al comienzo del programa, consciente de que el día 1 ella es la protagonista de muchos titulares y comentarios. Pese a eso, el presentador del espacio, Dani Mateo, ha querido piropear su monólogo en un año tan complicado. «Lo hice muy real, son mis palabras. Estoy contando una cosa muy personal, muy mía, y creo que la gente se ha podido sentir un poco identificada», ha respondido ella.
De hecho, el vestuario de esa noche tenía mucho de homenaje y es que con el abrigo que se cubría del frío de Madrid quiso recordar los meses de confinamiento con un «edredón deconstruido». Era debajo de esta gran prenda donde se escondía la verdadera sorpresa, un vestido con el quería recordar a través de su forma y color a las mascarillas higiénicas y a los sanitarios. Una pieza única y polémica compuesta por más de 16.000 cristales que hacían de ella una auténtica pieza de artesanía.
Como ha explicado el estilista de Cristina, Josie, no era una pieza fácil de llevar y es que el vestido, aunque era muy pequeño, era muy pesado. «Era bastante difícil por el peso de un vestido tan mínimo. Es un desafío a la gravedad en un espacio mínimo», ha dicho, refiriéndose a la prenda, de 7 kilos, como un «microvestido joya». Y es que para sujetarla solo contaba con unos finos tirantes de tipo espagueti, elegantes pero delicados.
Tampoco hay que olvidar la gran audiencia cosechada, algo que a la madrileña parece no importarle en demasía. «A mí lo que más me llena son todas estas fotos, los Tik Tok, que la gente se lo pase bien… Yo lo hago por esto, no lo hago por ganar o no ganar. Yo tengo un contrato de cadena y si hago las Campanadas o no las hago gano lo mismo», ha querido aclarar, poniendo así punto final a una polémica que también ha sido noticia en los últimos días sobre la supuesta cantidad que se habría embolsado por haber dado la bienvenida al 2021.