Así se gestó el sí de Cristiano Ronaldo a su nuevo hogar: te contamos por qué la eligió y cuánto paga por ella
El futbolista portugués ha elegido dos maravillosas mansiones en las colinas de Turín
Cristiano Ronaldo es un hombre de sueños cumplidos. Ser el número uno en su profesión le da carta blanca para poder cumplir todos sus caprichos, por mucho que cuesten. El último, dos maravillosas mansiones en las colinas de Turín y de las que LOOK conoce todos los detalles.
Desde que aterrizó en Italia como consecuencia de su fichaje por ‘la Juve’, se puso en marcha un plan para conseguir que el portugués se sintiese tan a gusto como en España, empezando por el hogar en el que él y su familia tendrían que residir. Encontrar una residencia como la que el astro poseía en La Finca iba a ser una tarea mesiánica, su entorno lo sabía, y precisamente por eso fueron muchas las propuestas para el jugador. Finalmente solo una dio en el clavo con sus expectativas reuniendo todos sus requisitos. ¿El precio? 25.000 euros al mes, un importe al alcance de muy pocos bolsillos.
Tal y como ha podido saber LOOK por fuentes cercanas a la operación inmobiliaria, el sí a la mansión que ahora ocupa el deportista -con más de 800 metros cuadrados levantados en una parcela de 4.747- llega después de que descartara una residencia histórica de la misma zona, Borgo Po. Esta casa en cuestión era un palacio de estilo renacentista de cuatro hectáreas de jardín, varios salones, más de 10 habitaciones, piscina interior y exterior, techos altos y frescos en las paredes. Sin embargo, nada de esto convenció al exmadridista. Cuando el jugador la vio la desestimó inmediatamente. “Yo ya viví en una casa vieja en Madeira. No volveré a una casa vieja nunca más”, aseguran a LOOK que dijo el futbolista. A Ronaldo le dio igual que fuera un palacio con más de 300 años de historia. A él lo que le va es lo moderno, el metacrilato y las paredes de vinilo.
Cristiano Ronaldo has chosen his Turin residence. A private double-villa. #GdS pic.twitter.com/vEekNqHY1j
— Tarek Khatib (@ADP1113) 30 de julio de 2018
Con sus gustos perfectamente definidos, Cristiano se decantó finalmente por una casa nueva por la que, tal y como avanzábamos en las primeras líneas, pagará 25.000 euros al mes. Eso sí, según ha podido saber este digital, el jugador ha sido agasajado con un cuantioso descuento por mérito y obra de su nuevo club.
Construida en las colinas de Turín y rodeada por árboles frondosos que la dotan de una gran privacidad, el proyecto que conquistó a Cristiano Ronaldo consta de dos casas unidas por un puente. En una vive el jugador, su novia y sus hijos, y la otra está destinada a las visitas, especialmente, la familia de Ronaldo. La casa, como cabía esperar, está completamente vigilada, tanto por personal de seguridad como por cámaras de televisión y para acceder a ella se necesita un permiso especial. Dentro de la residencia se encuentran varios salones, todos acristalados, un total de 10 habitaciones, varias piscinas y un gimnasio que hace las delicias de Cristiano y Georgina.
Las artífices del milagro
Pero detrás del alquiler de esta casa que conquistó las exigencias de Cristiano Ronaldo existió una ardua labor encabezada por dos mujeres que hasta la fecha han estado a la sombra del jugador a pesar de la importancia de su papel. Se trata de Marisa Mendes y Paula Brito, las artífices del milagro de encontrar una casa de características similares a la de la Finca pero en Turín.
Marisa es la hija de Jorge Mendes, el ‘super agente’ deportivo que más dinero mueve en el mundo. Licenciada en Marketing, se ha ido adentrando poco a poco en el entramado empresarial familiar. Durante años acompañó a su padre en todo. Empezó llevando las redes sociales de CR7 y se ha convertido a día de hoy en su auténtica mano derecha.
Por su parte, Paula Brito es la reputada decoradora portuguesa y favorita de Cristiano. Fue la responsable de la decoración de otras casas del futbolista, entre ellas la de Madrid, y también ha dado su toque personal a algunas dependencias de la cadena de hoteles que llevan el nombre del portugués. Como no podía ser de otra manera, también ha decorado su nueva residencia en Turín, donde predominan los colores blanco, negro y gris. Solo en las habitaciones de los niños se ha permitido una nota más de color. En definitiva, un hogar de vanguardia, donde abundan los retratos de Cristiano Ronaldo, algunos en tamaño natural y muy al gusto de Georgina Rodríguez, que aunque se ha dejado aconsejar, ha querido darle a este nuevo hogar su sello personal. No lo tenía difícil teniendo en cuenta el presupuesto.