Consigue unas pestañas más largas de la forma más fácil y sencilla
Si hay tres cosas en cuestión de beauty que consiguen darnos plena satisfacción, esas son unos labios perfectos (tanto si solo llevan gloss y se ven gruesos como si consigues un look en mate perfectamente delineado), un eyeliner impecable y unas pestañas larguísimas. Consigue unas pestañas más largas de la forma más fácil y sencilla.
Y aunque el primero y el segundo son cuestión de práctica, para el tercero necesitamos aplicar unos cuidados específicos a nuestras pestañas y las técnicas correctas de maquillaje para conseguir unas pestañas largas y sanas que luzcan bonitas y consigan enmarcar bien nuestra mirada.
Para conseguir que crezcan, no solo largas, sino también fuertes, hay diferentes cosas que podemos hacer además de llevar una dieta sana y equilibrada, que siempre contribuye a hacer crecer nuestro pelo (tanto de la cabeza como de las cejas y por supuesto de las pestañas) y a que estas no se caigan ni se rompan tan fácilmente, pues con una buena nutrición conseguimos evitar que estén débiles haciendo que desde su nacimiento crezcan más fuertes y sanas.
Nuestra alimentación debe ser baja en grasas, rica en hierro y en vitaminas H y E que ayudan a metabolizar grasas y favorecen el crecimiento del pelo en general. Sobre todo la vitamina H que es esencial también ¡para personas que sufren alopecia!
Mantén una rutina facial adecuada ¡y busca los productos que mejor te funcionen!
Además de alimentarnos correctamente y de forma estratégica, también debemos dedicar algunos minutos al día a cuidar nuestras pestañas y eso significa tanto desmaquillarlas correctamente, como aplicar en ellas algunos productos que puedan ayudarlas a crecer.
Te servirán el aloe vera, el té verde, el aceite de oliva o la vaselina labial, y tan solo tienes que aplicarlos en un disco de algodón (siempre algodón que no suelte partículas) y ponerlo en las pestañas a pequeños toquecitos, intentando que no entre en los ojos (por lo que es recomendable aplicarlo antes de dormir).
Al día siguiente enjuágate bien con agua tibia y siempre que te maquilles, recuerda desmaquíllate antes de dormir (y por supuesto antes de aplicar los productos que te hemos aconsejado) pues es un paso clave en el cuidado de tu rostro y de tus pestañas, ya que los restos de maquillaje no sólo pueden dañar tu piel, sino que acabarán haciendo daño a estas y las debilitarán, promoviendo así que se caigan o se rompan con mayor facilidad.
Por último, debes saber que cepillar las pestañas con un cepillo de rímel que esté gastado, por ejemplo, es también un método bastante efectivo porque estimularemos la zona y ayudaremos a que los productos actúen con más eficacia, aunque también hay cepillos especiales de pestañas y cejas que se pueden adquirir.