Con estos tres remedios conseguirás tener las manos suaves siempre
Gracias al uso de aceite de oliva, de azúcar o de miel podemos aplicar tratamientos para suavizar unas manos secas y ásperas.
¿Cómo suavizar las manos ásperas y secas ? La piel de las manos puede agrietarse con facilidad pero no solo debido al frío, sino también a las altas temperaturas del verano, o también si las lavas con agua muy caliente y detergentes agresivos o incluso tienes patologías como la psoriasis o el eccema, que deben ser tratadas por un medico o para los casos más leves, puedes recurrir a los tres remedios sencillos que ahora os ofrecemos.
Cómo suavizar manos secas y ásperas: 3 remedios sencillos
Conozcamos al detalle, los remedios sencillos que podemos aplicar para suavizar unas manos que están secas y ásperas.
Tratamiento de noche
Para manos ásperas y secas, puedes probar una crema a base de cera de abejas o en cualquier caso adecuada para tus manos y tu tipo de piel, con propiedades hidratantes y emolientes. Hacer un tratamiento de noche: distribuir la crema en las manos, pero no dejar que se absorba por completo, sino que tenemos que extenderla abundantemente y dejar actuar durante la noche con guantes, incluso los que están disponibles en los supermercados o un material adecuado para la piel.
Aceite y azúcar
Otro buen remedio que tenemos disponible para suavizar las manos es el aceite de oliva: ponte un poco en las manos y distribúyelo en la palma, en el dorso, entre los dedos y masajea bien. También puedes usar un poco de azúcar y esparcirla en todas las esquinas con movimientos circulares. Con el aceite y el azúcar habrás creado un exfoliante que elimine las células muertas y dé suavidad.
Miel
En la cocina, hay otro ingrediente que puede ayudar a suavizar las manos ásperas y secas: la miel, que también se utiliza para tratamientos de belleza. Incluso con este elemento, puedes preparar un exfoliante, para poner en las manos mojadas: combina más o menos una cucharada de azúcar con media cucharada de miel y unas gotas de agua. Las cantidades son indicativas: tienes que dosificarlas para obtener una papilla.
Para los remedios vistos, la precaución básica es evitar la aplicación de los ingredientes sobre heridas y fisuras. De cualquier manera, para asegurarse de que no tenga una reacción, puedes intentar antes el remedio en una pequeña parte.
Una vez que vuelvas a tener las manos suaves, debes aplicar un mantenimiento , con la aplicación de la crema al menos una vez al día y protección con guantes.
Especialmente si la sequedad persiste y tus manos aún están ásperas y agrietadas, será bueno comunicarse con un médico para realizar una evaluación de cualquier patología relacionada.