La pillada más sonada de Felipe VI en su etapa como príncipe: sus fotos con Gigi Howard
La princesa Leonor ha sido captada en bikini en Uruguay
En 1995 fue a don Felipe al que se pilló en un plan privado

Las imágenes de la princesa Leonor disfrutando de un día de descanso junto a algunos de sus compañeros en Montevideo han dado la vuelta al mundo. Ha sido la primera vez que vemos a la hija mayor de los Reyes en bikini, algo normal en cualquier chica de su edad, pero que no deja de llamar la atención al tratarse de la heredera al trono. El reportaje, que se realizó a principios de marzo pero que ha visto la luz ahora, ha generado una gran expectación y reacciones de todo tipo. Sin embargo, no es la primera vez que un miembro de la Familia Real es fotografiado en traje de baño o durante un plan privado.
De hecho, cuando el padre de la princesa, Felipe VI, alcanzó la mayoría de edad y empezó su formación militar, el interés por sus planes privados fue in crescendo. Imposible olvidar las fotografías del entonces príncipe de Asturias en Mallorca junto a su primera novia, Isabel Sartorius, o todos los reportajes que vinieron después, hasta llegar a sus actuales escapadas a la nieve. Obviamente, el interés es menor cuando se trata de cosas que ya ha hecho, pero cualquier detalle que nos permita saber más de la vida privada del Rey sigue siendo un gran reclamo.
El Rey Felipe con Gigi Howard. (Foto: Gtres)


El Rey Felipe con Gigi Howard. (Foto: Gtres)
Esta vez no vamos a entrar en todas las ocasiones en las que se ha fotografiado a Felipe VI en su faceta más íntima, pero sí en una vez que causó un mayor revuelo, cuando era mayor que su hija Leonor y estaba estudiando un posgrado en la prestigiosa Universidad de Georgetown.
La escapada de Felipe VI a St. Martin
En abril de 1995 los reporteros descubrieron a don Felipe disfrutaron de un viaje a la isla caribeña de St. Martin junto a su primo el príncipe Pablo de Grecia, su novia y una tercera joven: Gigi Howard. En ese momento se esperaba que don Felipe viajara a Mallorca para pasar las vacaciones de Pascua con su familia, pero, en lugar de eso, prefirió quedarse estudiando en Washington. Eso fue lo que se dijo, pero la realidad era que el padre de la princesa Leonor quería aprovechar para disfrutar de un poco de tiempo libre alejado de la presión mediática. No lo consiguió y los paparazzi pillaron a don Felipe en plenas vacaciones.
El príncipe de Asturias no dudó en disfrutar del descanso de primavera como cualquier otro joven y poner como excusa que tenía que estudiar. El actual Rey se viajó con su grupo de amigos al Caribe, pero no contaba con la presencia de los paparazzi. Fue Hugo Arriazu el que siguió al heredero y captó las imágenes en actitud divertida y cariñosa con Gigi Howard, aunque en ese momento no se conocía la identidad de la norteamericana. El reportaje fue portada de la revista Pronto.


Portada de la revista Pronto. (Foto: Pronto)
El responsable de averiguar quién era la joven fue un detective, Carlos Fernández. Arriazu contó después que vivió un complicado episodio en el que intervino el FBI, ya que se le acusó de haber intervenido las comunicaciones de Gigi porque el detective había pinchado su teléfono.
A Arriazu se le condenó en Nueva York a seis meses en Rikers Island, pero cumplió dos meses antes de salir en libertad condicional. La modelo negó en el juicio ser la novia de don Felipe, de hecho, cuando se celebró el juicio en agosto de 1996, la presión era tal que la relación entre ambos fue imposible.
La propia Gigi Howard habló de ello en una entrevista a la revista Vanity Fair: «Tienes que ser una persona muy especial para poder lidiar con la intensidad y la invasión de la prensa, y yo no era esa persona. Soy muy discreta y eso no era para mí», dijo la modelo.


El Rey Felipe con Gigi Howard. (Foto: Gtres)
Para don Felipe, su estancia en Georgetown fue muy especial porque se podía sentir libre y lejos del constante interés de los medios. Allí disfrutaba de un anonimato que no tenía en España, lo cual le daba mucha tranquilidad. Así lo contó la periodista chilena Mónica Pérez en una intervención en el programa XRey, donde dijo que «se sentía contento de poder ir en bicicleta o comer hamburguesas sin que nadie se le acercase·. Allí podía vivir con cierta normalidad, a pesar de que tenía que llevar guardaespaldas.