Nuevo golpe para la hija del rey de Tailandia, que lleva 32 meses ingresada en el hospital
La princesa Bajrakitiyabha ha sufrido una infección en el torrente sanguíneo
La Casa Real de Tailandia ha estado dos años guardando silencio sobre este tema
La Casa Real de Tailandia llevaba más de dos años guardando silencio sobre el estado de salud de Bajrakitiyabha, la hija mayor del rey Vajiralongkorn. Sin embargo, los últimos acontecimientos han precipitado una reacción oficial y la institución ha emitido un comunicado confirmando que la princesa ha sufrido un nuevo revés. Ingresó hace 32 meses a causa de una afección cardíaca que la dejó inconsciente y, desde entonces, permanece hospitalizada bajo estricta vigilancia médica. Ahora la situación se ha complicado porque el equipo médico ha detectado una infección en el torrente sanguíneo.
El portavoz de la Familia Real se ha puesto en contacto con varios medios de comunicación y la noticia ha tenido un gran eco internacional. Países como España, Estados Unidos o Reino Unido siguen de cerca la evolución de Bajrakitiyabha, aunque el hermetismo oficial impide a la prensa acceder a toda la información. Lo único confirmado es que el rey y sus asesores han redactado un comunicado con el objetivo de frenar los rumores, aunque los especialistas consideran que será necesario ofrecer más detalles, ya que todavía quedan muchas dudas sobre el alcance real de la enfermedad.
«La infección empeoró y entró en el torrente sanguíneo, lo que obligó al uso de múltiples antibióticos y medicamentos para estabilizar la presión arterial. El equipo médico continúa ofreciéndole tratamiento completo y monitoreando de cerca su estado», indica la nota difundida por la Casa Real. A tenor de estas palabras, puede afirmarse que la situación está controlada dentro de la gravedad, aunque la incertidumbre ha hecho saltar las alarmas entre la población tailandesa, muy pendiente de la evolución de la princesa.
A sus 46 años, Bajrakitiyabha siempre ha gozado de una reputación intachable y muchos llegaron a considerarla la candidata natural para suceder al rey. Es la primogénita del monarca, fruto del matrimonio con su prima Soamsawali, de quien se divorció en 1991. Su perfil discreto, unido a su preparación académica y profesional, la convirtió durante años en una de las figuras más respetadas de la realeza tailandesa.
La delicada situación de la princesa
El 15 de diciembre de 2022, la primogénita del rey ingresó en el hospital Chulalongkorn tras desvanecerse de manera repentina. Los médicos comenzaron entonces a realizarle una serie de pruebas que revelaron que debía permanecer bajo cuidados intensivos durante un largo periodo. El problema fue que la Casa Real, en un intento por proteger su intimidad, apenas difundió datos concretos y eso generó numerosas especulaciones tanto en Tailandia como en el extranjero.
Con el paso del tiempo, la institución admitió que la princesa tenía afectados varios órganos vitales, entre ellos el corazón, los pulmones y los riñones. Aunque aseguraron que se mantenía «estable hasta cierto punto», lo cierto es que la situación era compleja y preocupante desde el inicio. Ahora, la aparición de una infección grave ha vuelto a poner en el foco la frágil salud de la heredera.
La prensa tailandesa ha dejado de esquivar la cuestión y ha identificado el origen del problema. Según los últimos datos, una bacteria microplasma le habría provocado una inflamación cardíaca y una alteración severa del ritmo del corazón. Los próximos días serán determinantes para conocer cómo evoluciona el cuadro clínico, pero la inquietud en el país es evidente y cada vez crece más la preocupación por el futuro de la princesa.