Matilde de Bélgica, un ejemplo de solidaridad en medio de la crisis: ayuda a los ancianos para superar el COVID-19
La reina Matilde de Bélgica ha sacado su lado más solidario en uno de los momentos más complicados de su reinado
Europa se está enfrentando a una crisis sin preferentes en todos sus ámbitos y, si bien la vida se ha puesto ‘en pausa’, los dirigentes siguen al pie del cañón para transmitir tranquilidad en estos momentos de incertidumbre. Los reyes de las diferentes monarquías europeas no han sido menos y todos ellos han terminado cancelando sus agendas oficiales para dar ejemplo y mostrar a los ciudadanos de sus países que en estos momentos lo importante es quedarse en casa.
La familia real de Bélgica fue una de las primeras en reprogramar su agenda, en la que había un viaje a Italia, uno de los países que más se han visto afectados por el coronavirus. Pero la cosa no ha quedado ahí pues Felipe y Matilde de Bélgica, al igual que los reyes Felipe y Letizia, han decidido parar su actividad en su propio país.
Esto no ha hecho que los belgas, en cuyo país la situación no es tan crítica como en España, hayan aprovechado el fin de semana para mostrar su solidaridad. La reina Matilde acompañada de sus dos hijos pequeños, los príncipes Emmanuel, de 14 años, y Eleonore, de 11, han hecho una visita muy especial a la residencia de ancianos Huis Heizel, que en estos días no permiten las visitas, para sorprender a sus habitantes.
La familia llegó cargada de dulces y de flores para animar a los ancianos de dicha residencia, que se encuentra en los alrededores del Palacio de Bruselas. Si bien no pudieron acceder al interior del edificio ni saludar personalmente a los residentes y a los empleados, no dudaron en saludarles a todos desde las puertas y ventanas después de haber dejado los presentes que les habían llevado.
«Siento mucho haber traído tan pocas flores, pero estamos a final de temporada», dijo la reina Matilde a una de las enfermeras, que le quitó hierro al asunto recordándole que en estos momentos «cada gesto cuenta».
El coronavirus no solo ha trastocado la vida de los reyes Felipe y Matilde, sino también los de su hija mayor, la princesa Elisabeth. A sus 18 años, la joven se encuentra estudiando en el centro UWC Atlantic College de Gales, del que se ha tenido que despedir temporalmente para pasar la cuarentena rodeada de los suyos.