¿Defensa o ataque?: Harry y Meghan ‘paran los pies’ a Buckingham
La pareja vuelve a tensar sus relaciones con el palacio de Buckingham tras la publicación de un artículo en el que miembros de su personal les acusan de bullying
A pocos días de que se emita la esperada entrevista de los duques de Sussex con Oprah Winfrey y con el duque de Edimburgo ingresado desde hace más de dos semanas en Londres, continúan las polémicas en torno a la relación entre Harry y Meghan y la familia real. La última tiene que ver con unas presuntas acusaciones por parte de algunos extrabajadores de Meghan que se quejaron en 2018 de manera oficial por el bullying que recibían por parte de la Duquesa. Una información que ha sido publicada en el diario “The Times”, con testimonios que aseguran que Markle mantenía actitudes poco apropiadas hacia su personal y que “siempre tenía a algún empleado en su punto de mira”.
Una serie de acusaciones a las que tanto Meghan como Harry no dudaron en responder a través de su equipo de abogados, poniendo en el punto de mira al palacio de Buckingham por “ofrecer una versión completamente falsa”. “Llamemos a esto por su nombre: una calculada campaña de calumnias basada en informaciones engañosas y dañinas. Nos decepciona que los medios den credibilidad a esta representación difamatoria de la duquesa de Sussex”, reza el comunicado por parte de los Sussex, que insiste en que no resulta casualidad que estas “viejas y distorsionadas acusaciones dirigidas a socavar a la Duquesa estén siendo filtradas a los medio británicos poco antes de que el Duque y ella hablen abierta y honestamente de su experiencia en los últimos años”. Y es que no es la primera vez que se habla de los presuntos problemas de la esposa del príncipe Harry con los trabajadores que han estado a su servicio durante su etapa como royal.
Desde Buckingham se han apresurado a responder a esta grave cuestión. Mediante un nuevo comunicado -el segundo en apenas unas semanas que afecta a los Sussex-, la Corona ha manifestado su preocupación por el asunto: “estamos realmente muy preocupados por las acusaciones publicadas en “The Times” que han hecho antiguos miembros del equipo de empleados del duque y de la duquesa de Sussex”, reza el texto, en el que anuncia que se va a proceder a realizar una investigación para aclarar las circunstancias que han motivado las quejas del los miembros del equipo que trabajaba para la pareja: “vamos a investigar las circunstancias descritas en el artículo. El personal que trabajaba con los duques en aquel momento, incluso aquellos que dejaron su puesto, serán invitados a participar para descubrir si podemos aprender alguna lección sobre lo ocurrido”, aseguran fuentes de Buckingham. El comunicado insiste además que “la Casa Real tiene activa una política de Dignidad en el Trabajo desde hace varios años y no tolera ni tolerará este tipo de acoso en el lugar de trabajo”.
No es este el único asunto al que hace referencia el artículo de “The Times”. El diario apunta a unos pendientes que la Duquesa ha llevado en al menos dos ocasiones y que fueron un regalo de boda del príncipe saudí Mohamed bin Salman. Meghan los lució en una cena oficial en Fiji en 2018 y después en un almuerzo en Buckingham. Entonces se dijo que habían sido un préstamo y no habría nada extraño en ello si no fuera porque el Príncipe había sido acusado por Estados Unidos de haber ordenado el asesinato del disidente Jamal Khashoggi. Tal como apunta el diario, fue Meghan quien le indicó a su equipo de prensa que dijeran que los pendientes eran un préstamo, a pesar de ser consciente de su procedencia.
Los Sussex mantienen que se está llevando a cabo una campaña dañina y difamatoria en su contra, ya que todas estas informaciones se publican cuando está a punto de emitirse la entrevista en la que van a revelar “toda su verdad”. Ante esta situación, Meghan se encuentra “muy entristecida, sobre todo por ser alguien que ha sido personalmente víctima de acoso y por estar profundamente comprometida a apoyar a aquellos que han experimentado dolor y traumas”, ha explicado el portavoz de la pareja. Está claro que aún quedan muchas cosas por descubrir.