Marta Luisa de Noruega y el chamán ya son marido y mujer: la ‘cara b’ de la boda más controvertida
La princesa y el chamán se han casado en una de las bodas más esperadas del año
La pareja ha puesto el broche de oro a su historia de amor
Marta Luisa de Noruega y el chamán Durek Verret se han convertido por fin en marido y mujer. La pareja ha puesto el broche de oro a su historia de amor que comenzó en 2019 y de, desde entonces, ha estado marcada por la polémica. A pesar de los rumores y especulaciones, la pareja siempre ha defendido su amor ante todo, y se ha enfrentado a quienes han cuestionado su relación. Ahora, por fin, la hija de los reyes de Noruega y el chamán han sido protagonistas de un enlace al que han asistido miembros de la realeza, pero que no ha sido un enlace real al uso. Entre los invitados a la boda no han faltado, además de la Familia Real de Noruega, la princesa Victoria de Suecia, con su marido, su hermano y su cuñada, así como los príncipes Constantino y Laurentien de Holanda.
Las celebraciones comenzaron el pasado jueves con la llegada de algunos invitados a Geiranger, el espectacular enclave que el ya matrimonio ha elegido como escenario para darse el ‘sí, quiero’. Sin embargo, ha sido este sábado cuando ha tenido lugar la boda. Una boda en la que Marta Luisa de Noruega ha vuelto a llevar tiara y en la que la buena sintonía entre el chamán y su familia política ha quedado patente en todo momento.
El look de la novia
Hacía tiempo que no veíamos a Marta Luisa con tiara, dado que ya no tiene un papel oficial dentro de la Familia Real. Sin embargo, en este día tan especial, la hija mayor de los reyes Harald y Sonia ha recuperado la tiara de la cebada, que le regaló su abuelo, el rey Olav V, por su 18 cumpleaños.
En cuanto a su vestido de novia, Marta Luisa ha elegido el blanco de nuevo, con un precioso diseño de escote pico y bordado con flores y encaje, con el que estaba radiante.
Por su parte, las tres hijas de la princesa Marta Luisa, fruto de su matrimonio con Ari Behn, han tenido un papel protagonista en el enlace, y han vestido de manera similar, con diseños en color champán.
Los trajes de la Familia Real
Poco antes de trasladarse al lugar en el que se ha tenido lugar el enlace, la Familia Real de Noruega ha posado a bordo del yate real, el Norge, que sirve de residencia durante los días en los que han durado las celebraciones.
Los reyes Harald y Sonia de Noruega se han fotografiado en una de las cubiertas del barco junto a los príncipes herederos, Haakon y Mette-Marit, y sus dos hijos, la princesa Ingrid y el príncipe Sverre Magnus.
Mientras que el rey y el príncipe heredero han llevado esmoquin, tanto la reina, como la princesa Mette-Marit y sus dos hijos han lucido el traje regional de gala, el bunad, del que hay más de 400 variedades. En el caso de la reina Sonia, ha llevado el bunad de East Telemark. Por su parte, la princesa Mette-Marit ha lucido el bunad de Hardanger, y su hija mayor es un modelo especialmente confeccionado para ella, inspirado en los trajes de Aust-Telemark. El príncipe Sverre Magnus ha llevado el mismo bunad que lució en su 18 cumpleaños. Todos estos trajes se caracterizan por sus elaborados bordados.
La sonada ausencia de Marius Borg
Como era de esperar, el gran ausente a las celebraciones ha sido el hijo mayor de la princesa Mette-Marit de Noruega. Marius Borg lleva en el punto de mira varias semanas, después de que fuera arrestado por la policía a consecuencia de su comportamiento violento con una joven, que tuvo que ser hospitalizada. Él mismo reconoció su actitud agresiva y se disculpó en un comunicado en el que reveló que había consumido sustancias ilegales y alcohol y dijo, además, que se iba a poner en tratamiento por una serie de problemas mentales.
La Casa Real se ha mantenido al margen de los hechos, pero la princesa Mette-Marit sí que ha estado en contacto con la víctima, mientras que el príncipe Haakon ha reconocido que la situación es grave. A esto hay que añadir, que dos de las ex novias de Marius también le han acusado de mantener con ellas un comportamiento violento.
La complicidad de Mette-Marit y Haakon
A pesar de que la princesa Mette-Marit está atravesando un momento delicado por todo lo que está ocurriendo con su hijo mayor, la mujer del heredero se ha dejado ver a lo largo de esta boda tranquila y sonriente. Es más, en algún momento de la ceremonia, se ha podido ver a ambos compartiendo gestos de cariño e incluso algún beso, ajenos a la presencia de las cámaras.
Una presentación oficial
Más allá de los novios, esta boda ha tenido otro gran protagonista. El hijo menor de los príncipes herederos, Haakon y Mette-Marit de Noruega, el príncipe Sverre Magnus, ha concentrado gran parte de la atención debido a que ha presentado oficialmente a su novia Giæver Macleod, con la que se le ha podido ver de la mano en varias de las citas con motivo de este enlace. La joven está muy integrada en la familia de Sverre Magnus, aunque ha sido ahora cuando ha participado por primera vez en un compromiso de esta envergadura. Ella también ha vestido un bunad en la celebración principal aunque, como es lógico, no ha posado en la fotografía oficial de la Familia Real.