Amalia de Holanda eclipsa a Máxima con su tiara más especial
La princesa cada vez tiene más agenda oficial
Hace poco estuvo en un acto en Madrid
Después de su visita exprés a Madrid para inaugurar una placa en el jardín de tulipanes en las inmediaciones del Palacio Real, Amalia de Holanda ha participado en varios de los actos con motivo de la visita del sultán de Omán a los Países Bajos. Un viaje en el que la princesa de Orange ha acaparado todas las miradas, por encima incluso de su madre, la reina Máxima.
Aunque todavía no tiene una agenda propia como tal, la hija mayor de los reyes de los Países Bajos participa cada vez más en actos oficiales, sobre todo, desde que debutara en una cena de Estado durante la visita de los Reyes don Felipe y doña Letizia al país. Antes de eso ya la habíamos visto con tiara en la boda de Hussein de Jordania y en otros actos de menor envergadura.
Amalia ha sido la gran protagonista de esta velada en la que su madre también ha brillado con luz propia. La princesa de Orange ha escogido para esta ocasión un precioso vestido con capelina en color malva de la firma británica Safiyaa, una marca a la que han recurrido otras royals como Meghan Markle. Según ha trascendido, el modelo ha sido hecho a medida y por encargo para Amalia.
Sin embargo, lo que más ha llamado la atención ha sido la elección de las joyas. Amalia ha recurrido a piezas con rubíes, que se han convertido, sin duda, en sus favoritas. En este caso ha elegido una tiara de la casa Melleiro, con diamantes y rubíes. Una pieza que ya le habíamos visto antes, ya que es la misma que llevó en la fotografía privada que se apareció en el libro de Claudia de Brej, cuando apenas era una niña. Amalia posaba con la pieza en una de las habitaciones de su madre.
La diadema es una de las más significativas del joyero de los Orange. Una tiara encargada por Guillermo II para su esposa, la reina Emma y que cuenta con casi 400 piedras entre rubíes y diamantes. Amalia ha completado su estilismo con pendientes de rubíes, brazalete y anillo a juego con la diadema, al igual que ha hecho su madre en otras ocasiones.
La elección de Máxima de Holanda
A pesar de que en esta ocasión todas las miradas se han dirigido a la princesa Amalia, también el estilismo de la reina Máxima merece atención. La argentina ha optado por recurrir a su fondo de armario y ha rescatado un historiado vestido que ya llevó en la boda de los príncipes Hussein y Rajwa de Jordania en la primavera de 2023.
El vestido, en tonos beis y bordado con detalles de pedrería, fue un regalo que la reina recibió en una visita a Pakistán en 2019, acompañando a la ONU. En origen el diseño era un dos piezas que dejaba el abdomen descubierto y estaba inspirado en los conjuntos tradicionales de La India. La diseñadora del conjunto es Mahpara Khan. Sin embargo, por sus gustos personales y también por cuestiones protocolarias, Máxima decidió adaptar el modelo y hacer un vestido completo, sin aberturas.
La reina ha recurrido también a algunas de las piezas más importantes de su joyero. La esposa de Guillermo-Alejandro ha llevado un espectacular collar de perlas de varias vueltas y la tiara de Württemberg. Una diadema muy especial que forma parte del joyero de los Orange desde 1897, justo un año antes de la investidura de la reina Guillermina. Esta joya puede lucirse de diferentes formas según la ocasión, con las perlas superiores o sin ellas, si se prefiere un aspecto más sencillo. En este caso, Máxima ha optado por la versión completa.