Vicky Martín Berrocal cumple 48: las claves que hacen de este, el gran momento de su vida
Enamorada, viviendo en Portugal y trabajando en su firma de moda y en televisión.
Hace un año el coronavirus comenzaba a campar a sus anchas, y tan solo quedaban tres días para el confinamiento, y Vicky Martín Berrocal cumplía años con un desfile cancelado y sin poder celebrarlo con su pareja, Joao. Doce meses después la sevillana sopla 48 velas en un momento muy dulce en el que los cambios han sido los protagonistas del último año. Está enamorada, vive en Portugal, es una profesional respetada en el mundo de la moda y además ha encontrado también su hueco en la televisión, de la mano de Bertín Osborne.
Joao Viegas Soares es el hombre que le ha conquistado. Llevan juntos dos años. El 1 de noviembre es una fecha marcada en su particular calendario porque fue ese día de 2018 cuando le cogió de la mano por primera vez, y hasta hoy. Ella misma lo contaba en sus redes sociales, aprovechando su aniversario, y la dedicatoria no podía ser más romántica y más sincera: «Él es el hombre con el que soñé toda una vida…ese, el del corazón por delante, el más humano, el más leal, legal y señor. El más sensible, el más canalla, el más valiente…el mejor. Qué lujo el mío encontrarte JVS. Gracias por enseñarme cómo se quiere cuando se quiere de verdad. Y como tú bien dices, la única manera de amar. Un regalo del cielo».
Por él aprovechó la desescalada para mudarse a Portugal. Y fue una «locura de amor» como la propia diseñadora ha reconocido en más de una ocasión. Una locura que tenía que hacer y no se lo pensó dos veces. En julio se instalaba en Villa Patiño junto a su novio. Un empresario del sector de las comunicaciones, divorciado y padre de cuatro hijos, con quienes tanto Vicky como su hija Alba, mantienen una excelente relación.
Pero si en lo personal la vida no le puede ir mejor, en lo profesional tampoco puede quejarse. La pandemia golpeó duramente la industria de la moda y más la flamenca y nupcial, donde Vicky tiene un nombre y es una de las creadoras más solicitadas. Se cancelaron desfiles, la Feria de Abril, bodas, bautizos, comuniones, pero la andaluza es una mujer de armas tomar y supo reinventarse y aportar su particular granito de arena. Solidaria donde las haya, puso su taller al servicio de los sanitarios fabricando batas y mascarillas para quienes estaban en primera fila en los hospitales de la capital hispalense.
Mientras todo vuelve a su ser, y la agenda de los ateliers se llenan de citas, las creaciones de Vicky vuelven a lucir espléndidas para todas aquellas que quieran llevar uno de sus diseños. No importa la figura, ella crea para todo tipo de mujeres y a todas las queda bien. Estilo, sencillez y glamour destila su firma. Comenzó con trajes de flamenca y ahora ya es todo un reclamo para invitadas de medio mundo y por supuesto para novias andaluzas y para todas aquellas que admiran su talento.
Pero es una mujer inquieta y a sus trayectos entre Portugal y España, la gestión de Victoria, su firma de ropa, también le suma su participación en la televisión autonómica andaluza donde ha conseguido tener una silla en el programa de Bertín Osborne. En ‘El show de Bertín’, Vicky ejerce de colaboradora durante la segunda parte de las entrevistas que realiza el presentador a sus invitados. Y no lo hace nada mal. Es una mujer muy querida y tiene arte y salero para hacer lo que quiera.
El coronavirus le jugó una mala pasada en noviembre. En una PCR dio positivo y no pudo entrar a trabajar, teniendo que guardar la cuarentena recomendada durante varias semanas. Ella misma lo contó a su vuelta: «He sido afortunada de no pasar por el hospital. Me pude ir a Portugal, he estado en casa, y no lo he sufrido como otras personas. Pero lo peor está en el coco. He pasado cinco días sin dormir con miedo», explicó en aquel momento. Perdió el gusto, el olfato y sufrió dolores musculares, especialmente en las piernas. A pesar de estos síntomas lo más duro para ella fue la soledad: «En otras ocasiones cuando he estado enferma siempre he tenido una hermana, una madre, una hija, un novio. Pero en ese momento no podría estar con nadie. La soledad es muy dura. Es una situación muy extraña psicológicamente». Superado el COVID, con trabajo y amor, Vicky Martín Berrocal cumple 48 años en el mejor momento de su vida. ¡Felicidades!.