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Tamara Falcó aparece muy seria tras la muerte del Papa Francisco: “Tuve el privilegio de conocerlo”

La marquesa de Griñón ha vivido recientemente dos muertes que han marcado la actualidad

El fallecimiento de Mario Vargas Llosa, el escritor y exnovio de su madre, Isabel Preysler, quien murió el 13 de abril

Y el adiós al Papa Francisco I, ocurrido el lunes de Pascua, a los 88 años, el día 18 del mismo mes

  • Rosa Torres
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Tamara Falcó ha reaparecido ante los medios con una expresión seria, tras el impacto de la triste noticia de la muerte del Papa Francisco, ocurrida el lunes de Pascua, a los 88 años. La marquesa de Griñón, que había estado disfrutando de unas vacaciones en Croacia con Íñigo Onieva, regresó a su rutina laboral después de las vacaciones de Semana Santa, visitando el taller de Pedro del Hierro, la firma para la que trabaja y diseña. A su llegada, los reporteros gráficos la sorprendieron, pero ella se mostró reservada y no quiso hacer comentarios. Sin embargo, a través de sus redes sociales, compartió un mensaje conmovedor, en el que expresó su pesar y recordó con cariño el privilegio de haber conocido al Pontífice. «Tuve el privilegio de conocer al Papa Francisco, un hombre profundamente comprometido con el Evangelio del Amor», escribió, acompañando el texto con una fotografía en blanco y negro en la que ella aparece junto a él.

El emotivo mensaje de la hija de Isabel Presyler fue una muestra de respeto y cariño hacia un hombre que, según sus palabras, se dedicó incansablemente a los jóvenes, a la familia y a la vida cristiana. La marquesa resaltó su cercanía y su constante mensaje de amor incondicional, y aseguró que el legado de Francisco perdurará en su corazón. «Siempre se mostró abierto, coherente y cercano», señaló en su post, mientras añadía que su vida, sacrificio y ejemplo vivirán en ella para siempre. En la foto, se la ve estrechando la mano del pontífice, mientras él sonríe cálidamente. El encuentro tuvo lugar en el año 2019. Tres años más tarde, la influencer regresó a la Ciudad Eterna, Roma, para un encuentro especial con el pontífice, al que le entregó un regalo muy significativo: una Virgen de la Alegría.

Tamara Falcó en un encuentro con Papa Francisco. (Foto: Redes Sociales)

Por ende, aunque ante las cámaras la socialité no se ha pronunciado abiertamente sobre la muerte del Papa argentino, su silencio habla por sí mismo. Fiel creyente y una devota defensora de la fe, no es difícil imaginar que este momento la haya tocado profundamente. A lo largo de los años, ella misma ha manifestado en más de una ocasión su admiración por la figura del pontífice. “El Papa es la pera”, decía en una entrevista de 2013 para la revista Lecturas, cuando se sinceraba sobre su conexión con la iglesia.

Selfie de Tamara Falcó junto a Íñigo Onieva durante sus vacaciones de Semana Santa 2025. (Foto: Redes Sociales)

La fe ha sido una constante en la vida de la hija de Carlos Falcó, quien no solamente la lleva como bandera, sino que la vive con una dedicación que va más allá de lo superficial. En su búsqueda de un significado profundo y espiritual, incluso llegó a considerar la opción de entrar en un convento y dedicarse por completo a la vida religiosa. No fue un simple arrebato, sino una transformación interna que se fue gestando durante años.

De hecho, tiene su propia joya religiosa: una medalla con la imagen de la Virgen María, diseñada por ella misma. Este colgante, con baño de oro y de Tous, siempre la lleva consigo.

Ni una palabra sobre la muerte de Vargas Llosa 

Parece que la diseñadora de moda está viviendo su propia versión del no news, good news, pero con una pequeña variante: las malas noticias siguen encontrándola. Antes de que el mundo llorara la muerte del Papa Francisco I, ya le tocó hacer frente a la de Mario Vargas Llosa, el escritor peruano y exnovio de su madre, Isabel Preysler, quien falleció el 13 de abril.

Tamara Falcó aparece junto a su madre, Isabel Preysler, y Mario Vargas Llosa. (Foto: Gtres)

Una figura importante en su vida, sin duda, porque estuvo en su familia ocho años. Pero, ¿quién lo diría? La marquesa de Griñón, fiel a su estilo, ha decidido que el dolor ajeno es algo que se vive en silencio… muy en silencio. Mientras todos se volvían emotivos en redes sociales y la televisión, la influencer se dio un respiro bien ganado, disfrutando de su escapada con su marido. Claro, ¿quién tiene tiempo para homenajes cuando uno está de escapada? Y si los reporteros la perseguían en el aeropuerto, ella, como buena hija de su madre, no soltó ni un suspiro.

Tamara Falcó está caminando al aire libre, disfrutando de un momento de paz con el escritor peruano. (Foto: Gtres)

Si algo le ha enseñado la ‘reina de corazones’, es que el arte del silencio en los momentos incómodos es fundamental. Y Tamara lo ha perfeccionado.

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