El verano más extraño de Sergio Ramos y Pilar Rubio y la fecha límite que se avecina
Agosto se encamina a su ecuador y eso significa que el compás de espera de Sergio Ramos hace lo propio. El reloj de arena se va vaciando ya que el próximo 2 de septiembre se cierra el mercado de fichajes y por lo tanto se agota el tiempo para que encuentre acomodo en un nuevo equipo. Es el verano más atípico del futbolista y de Pilar Rubio ya que ambos cuentan con la incertidumbre de no saber dónde van a residir de aquí a dos semanas.
Se van a cumplir dos meses desde que el ex futbolista del Real Madrid se despidiera por todo lo alto de Paris Saint-Germain. El club en el que ha militado las dos últimas temporadas no tuvo a bien renovar el contrato de un Ramos que quedaba libre para firmar por cualquier equipo. Sorprendentemente, eso no se ha producido una vez ha avanzado el mercado de fichajes. Y al mismo tiempo es algo que llama la atención ya que, pese a sus casi 38 años, sigue estando muy en forma y es considerado por la crítica deportiva como uno de los mejores defensas centrales de Europa.
El andaluz ha visto cómo se le han ido cerrando algunas puertas por unos u otros motivos. Su gran deseo era terminar su carrera en el Sevilla FC, el club que lo vio crecer como futbolista y del que es hincha confeso. Sin embargo, esta misma semana ha visto cómo su director deportivo le cerraba la puerta de bruces: «A día de hoy no existe ninguna posibilidad de que Sergio Ramos juegue en el Sevilla. Nosotros hemos hecho un modelo de plantilla con unas líneas a seguir», confesaba Víctor Orta. Un jarro de agua congelada para el zaguero.
Arabia Saudí o Estados Unidos han aparecido como posibles destinos más probables. Sin embargo, la prioridad del de Camas es terminar su carrera en primera línea europea. Las últimas informaciones surgidas hoy apuntan a que el Galatasaray podría ofrecerle dos años de contrato con un salario que rondaría los 4,5 millones de euros netos por temporada. ¿El problema? Que a la familia parece no convencerle demasiado marcharse a vivir a Turquía, tal y como sucede con el resto de aventuras exóticas.
La más perjudicada de una mudanza lejos de España sería Pilar Rubio ya que la colaboradora mantiene intactos sus trabajos en nuestro país. El primero y más llamativo es su colaboración semana en El Hormiguero. Afincarse en Estambul le obligaría a coger un vuelo todas las semanas. Al margen del programa de Pablo Motos, hay que sumar las campañas publicitarias y photocalls.
Mientras llega la gran decisión y solución a este panorama, Sergio Ramos sigue ejercitándose a tope para mantener intacta su vigorosa forma física, pero también encontrando momentos para desconectar con su familia, mujer e hijos. ¿Dónde vivirá el matrimonio la próxima temporada? Es altamente probable que ninguno de los dos lo sepa todavía, por increíble que parezca.