Rocío Carrasco en ‘Rocío, contar la verdad para seguir viva’: "Conmigo mi hija se sentía protegida"
Ha desvelado cómo era su relación con sus hijos
Ya lo adelantaba Carlota Corredera minutos antes de la emisión del sexto episodio de ‘Rocío, contar la verdad para seguir viva’, a partir de hoy “muchos entenderán qué ha pasado para que madre e hija no tengan relación”. Es ha sido una de las grandes incógnitas que ha perseguido a Rocío Carrasco durante estos 20 años que ha permanecido callada. Han sido muchos los colaboradores que aún escuchando su relato a lo largo de los primeros cinco episodios han seguido preguntándose por qué la hija de Rocío Jurado no mantiene ninguna relación con Rocío y David Flores.
A diferencia de las anteriores entregas, en esta Rocío Carrasco ha presentado hasta seis documentos que han avalado su testimonio, entre ellos un informe psicosocial que se realiza en el 2001 al núcleo familiar -Antonio David Flores, Rocío Carrasco y sus dos hijos-, donde los especialistas del juzgado determinan que los pequeños tenían en su madre a su figura de referencia. Y ella ha hecho hincapié en el de Rocío Flores: “Conmigo mi hija se sentía querida, se sentía protegida”, ha confirmado la hija de ‘La Más Grande’ entre lágrimas.
Sin embargo en el de Antonio David, el psicólogo escribe que el ex guardia civil acusa a su exmujer de no pasar tiempo suficiente con sus hijos o de tener hábitos de vida contrarios a los que él defiende. Además, el especialista concluye que la niña es capaz incluso de mentir con tal de agradar a su progenitor. «En eso es en lo que les ha criado, pero a que ellos han tenido la vivencia de todo lo contrario», ha dicho Rocío que además ha defendido su papel de madre: «No sabe lo que es una noche con fiebre, no sabe lo que es pasar una varicela».
Rocío ha contado que empieza a darse cuenta de que las cosas están cambiando cuando su pequeña empieza a experimentar terrores nocturnos cuando regresa de pasar un fin de semana con su exmarido y la niña le confiesa que su padre les ha dicho que «cuando ellos se duermen, se quedan solos». Algo que ha calificado como «crueldad supina».
Demanda por negligencia
Uno de los fines de semana, Antonio David devolvió a sus hijos con tres horas de retraso. Nada más llegar Rocío Carrasco ha contado que nota que su hijo tiene un bulto en el brazo y que al tocárselo el niño se estremece de dolor hasta el punto de casi desvanecerse. Es cuando su hija le cuenta que su hermano se había caído de una litera dos días antes y que su padre no le había llevado al médico.
Rocío y Fidel se trasladan de urgencia al Hospital San Rafael donde, tras una exploración y una radiografía se diagnostica que el niño tiene un brazo roto. De manera inmediata se interpone una demanda en el juzgado de guardia acusando a Antonio David Flores de negligencia en los deberes de custodia. Una denuncia que posteriormente retiró porque «no quería hacer nada que fuera en contra de los niños. Por eso no hago muchas cosas en mi vida, por la cara de esos niños». «Un silencio con las mejores intenciones, pero con los peores resultados», ha dictaminado minutos después Carlota Corredera.
Fidel y los niños
Mucho se ha hablado sobre la relación que tenía Fidel Albiac con Rocío y David Flores durante los años que convivieron juntos. Las críticas han sido tan feroces como las que han ido dirigidas a la propia Rocío Carrasco. Pero en este sexto episodio ha contado cómo fue en realidad la actitud de su ahora marido con sus hijos. «Era y ha sido una persona que se ha ocupado, se ha preocupado y se ha desvivido por ellos como si fueran suyos», ha comenzado diciendo. «Siempre les ha inculcado que respetaran y quisieran a su padre. Esos niños con Fidel eran locura», ha dicho.
Pero no ha querido terminar ahí y ha continuado desvelando la enorme complicidad que existía entre Fidel y los niños: «Siempre ha sido muy especial, muy tierno, condescendiente, mucho más blando que yo en muchos sentidos. Mi enano moría con su ‘Fidelito’, como él decía. Y Rocío, si le pasaba algo en el cole iba y se lo contaba a Fidel. Siempre fue muy cómplice de los niños».
Desacredita a Raquel Mosquera
El episodio número 6 titulado ‘Quién te crees tú’ comenzaba con la relación de Rocío Carrasco con su padre, Pedro Carrasco. No ha tardado en desmentir lo que siempre ha defendido Raquel Mosquera, que no es otra cosa que cuando su marido fallece no se hablaba con su hija. Mantuvo una reunión con ambos, a petición de Fidel, en la que Pedro terminó disculpándose con ambos y diciéndole a su hija lo mucho que la quería. El exmarido de Rocío Jurado fallecía el 27 enero de 2001 y dejó a su hija totalmente devastada. «Con él se fue un trozo de mi vida», ha reconocido entre lágrimas.
Rocío ha reconocido que las cosas no se hicieron bien tras la muerte de su padre, y además ha afirmado que no ha recibido las cosas que a Pedro le hubiera gustado que ella tuviera, en concreto el Rolex de oro que tenía grabada la fecha en la que se casaron sus padres. A pesar de las lágrimas, ha querido dejar clara su postura respecto a Raquel Mosquera, y ha sido tajante: «Para mí esta señora, señorita, mujer, persona…Para mí no existe», ha zanjado admitiendo que solo la tiene en cuenta en lo que a asuntos judiciales se refiere.