Richard Gere y Alejandra Silva compran su paraíso gallego por 10 millones
Richard Gere y Alejandra Silva han consolidado su vida familiar en España
La pareja se ha comprado una majestuosa propiedad en Galicia, tierra natal de Alejandra
La propiedad gallega, valorada en 10 millones de euros y ubicada en la playa de Santa Cristina, ofrece lujo, privacidad y cercanía
Richard Gere y su esposa, Alejandra Silva, han consolidado en España un refugio familiar donde disfrutar de la tranquilidad y la cercanía a las raíces de la empresaria. Tras varios años viviendo en Estados Unidos, la pareja ha decidido hacer de nuestro país su hogar, combinando la vida cosmopolita de Madrid con la calma de la costa gallega. Esta mudanza refleja no solo un cambio geográfico, sino también un proyecto de vida enfocado en la familia y el bienestar de sus hijos.
La pareja, que reside desde finales del año pasado en una elegante casa en La Moraleja, una de las zonas más exclusivas de Madrid, ha dado un paso más en su apuesta por España con la adquisición de una majestuosa propiedad en Galicia, tierra natal de Alejandra. Se trata de una mansión de ensueño ubicada en la playa de Santa Cristina, en Oleiros (A Coruña), que combina lujo y privacidad con espectaculares vistas al mar. La residencia ofrece todas las comodidades modernas que una familia internacional puede desear, con amplios espacios, jardines y acceso directo a la playa, creando un entorno ideal para el descanso y la vida familiar.
Según ha revelado SEMANA en exclusiva, la propiedad tiene un valor aproximado de 10 millones de euros y refleja perfectamente el estilo de vida que la pareja busca: tranquilidad, belleza natural y cercanía a la familia de Alejandra. La publicación detalla que la adquisición responde al deseo de Gere de que su esposa estuviera cerca de sus raíces tras años de vida en Estados Unidos. Esta nueva etapa combina el ritmo cosmopolita de Madrid con la serenidad de la costa gallega, ofreciendo lo mejor de ambos mundos a la familia.
Richard Gere ha hablado públicamente sobre este cambio de vida en varias entrevistas, destacando la importancia de Alejandra y su familia en su día a día. Según explicó, «le debía esto a mi mujer», refiriéndose al hecho de que, después de vivir siete años en Estados Unidos, era momento de acercarse a su familia y reconectar con sus raíces. La familia de Alejandra es muy numerosa y unida, y Gere ha compartido en tono afectuoso cómo los almuerzos familiares en Galicia pueden reunir hasta 35 personas, celebraciones que fortalecen los vínculos y mantienen viva la tradición familiar. El actor también ha reconocido la influencia de Alejandra como el nuevo «pegamento» que mantiene unida a toda la familia tras el fallecimiento de su abuela, destacando su papel central en la organización de estos encuentros.
La historia de amor entre Gere y Silva es un relato que bien podría formar parte de una película romántica. Se conocieron en 2014 en Positano, un enclave idílico de la Costa Amalfitana, cuando ambos estaban en procesos de divorcio de sus anteriores matrimonios. A pesar de la distancia entre España y Estados Unidos, su relación se consolidó rápidamente y, tras varios años de noviazgo, la pareja contrajo matrimonio en abril de 2018. La boda tuvo un carácter íntimo en el rancho de Gere cerca de Nueva York, en presencia de familiares y amigos cercanos, marcando el inicio de una vida en común llena de complicidad y estabilidad.
Alejandra Silva comparte con frecuencia en redes sociales momentos cotidianos de la familia, mostrando la vida familiar junto a Gere y sus hijos. Durante el cumpleaños del actor, la empresaria le dedicó un emotivo mensaje: «Feliz cumpleaños, mi amor. Este año ha traído cambios y desafíos, pero a través de todo has sido la constante de nuestra roca. Los chicos y yo sentimos tu amor en cada momento: la forma en que apareces por nosotros, la paciencia que traes, la fuerza que das y el corazón que viertes en esta familia… Eres el mejor esposo y el mejor papá siempre dando, siempre ayudando… Te amamos más allá de las palabras».
Con la adquisición de la residencia en Galicia, Gere y Silva refuerzan su compromiso con España y con la familia de Alejandra, creando un hogar donde poder disfrutar de la naturaleza, el mar y la vida en comunidad. Esta propiedad, junto a su vivienda en Madrid, permite a la pareja equilibrar la vida urbana con la tranquilidad de la costa, ofreciendo a sus hijos un entorno seguro y estable. La combinación de privacidad, lujo y cercanía a la familia hace de esta mansión el refugio perfecto para una de las parejas más emblemáticas de la crónica internacional, consolidando su nueva vida en España con la armonía y el cariño que siempre han buscado.