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El príncipe Enrique y Meghan Markle han recuperado la calma. Nada hacía presagiar que durante su breve gira por Europa vivirían uno de los momentos más complicados de sus vidas. A punto de regresar a Estados Unidos tuvieron que frenar todos sus planes. El 8 de septiembre saltaron todas las alarmas, cuando Buckingham emitió un comunicado en el que reveló que la reina Isabel había anulado uno de sus compromisos. Minutos después, aparecían los reporteros de la BBC vestidos de riguroso negro, lo que hacía presagiar que el final de la monarca estaba cada vez más cerca.
Fue por la tarde, alrededor de las 18:30 horas cuando se confirmó su muerte. Cuando esto sucedió, el príncipe Enrique ya se había desplazado a toda prisa hasta el Castillo de Balmoral, pero sin su mujer, por orden expresa de su padre, el rey Carlos III. Durante su estancia en Londres, los duques de Sussex se dejaron ver, visiblemente afectados tras la pérdida de la Reina, pero también por lo incómodo que estaba siendo para ellos estar entre los miembros de la Familia Real británica después de las numerosas declaraciones que hicieron previamente a su reencuentro.
El 10 de septiembre reaparecieron Enrique y Meghan junto a los actuales príncipes de Gales y los Duques. Una estampa que no se veía desde hacía algún tiempo. Fue durante esta aparición donde se pudo ver que Guillermo y Kate sí mantuvieron las distancias, mientras los Sussex mostraron su afecto en público, algo que que en términos reales se podría definir como romper con el protocolo. A las horas de protagonizar esta imagen, el hijo menor de la princesa Diana compartió un post en las redes sociales con el que confesó que fueron su hermano y Kate Middleton los que les invitaron a dar un paso por las inmediaciones del Castillo de Windsor para saludar a los allí presentes y así rendir un homenaje a su difunta abuela. “El sábado 10 de septiembre, el príncipe y la princesa de Gales y el duque y la duquesa de Sussex se han reunido para ver algunos de los muchos homenajes a la Reina dejados por el público fuera del Castillo de Windsor. El príncipe de Gales invitó al duque y a la duquesa de Sussex a unirse a él y a la Princesa de Gales antes”, se pudo leer en la publicación.
También, durante el funeral de la reina Isabel, se pudo ver cómo Meghan lloraba mientras pasaba el féretro de la difunta Reina justo enfrente suya. Sin duda, fue una de las imágenes más significativas de aquel día, ya que demostraron, que, pese al distanciamiento con la Corona, la abuela de su marido era intocable, tanto para ella como para él. Se podría decir que era su único apoyo dentro de la familia.
Una vez finalizó el entierro de Isabel II, Enrique y Meghan se trasladaron de nuevo a Estados Unidos. Recientemente, el pasado 10 de octubre, reaparecía el Príncipe de manera virtual tras perder a su abuela. El duque de Sussex participó desde su casa de California en una videollamada con niños muy enfermos y sus familias. En esta intervención, Enrique se reveló cómo están sus hijos. «Archie está muy ocupado y Lili está aprendiendo a usar su voz, lo cual es genial”, dijo. Al escuchar la voz de Henry Waines, un niño de cuatro años, el Duque reaccionó espontáneamente: «Suenas igual que mi hijo Archie… tienes la misma vocecita chillona. Me encanta».