Kiko Rivera: “He tenido adicción a la marihuana, hachís y cocaína”
Tras confesar su adicción a las drogas, el hijo de Isabel Pantoja lanza un importante mensaje de esperanza y superación personal a la audiencia del 'reality'
Kiko Rivera se ha convertido en el protagonista indiscutible de GHDúo. El Dj, que hasta el momento ya estaba gozando del favor del público por su actitud dentro de la casa de Guadalix, hablaba abiertamente del grave problema de salud que ha arrastrado durante los últimos años. A corazón abierto, el hijo de Isabel Pantoja explicaba dentro del habitáculo de La curva de la vida (en el que los concursantes repasan los momentos más importantes de su vida) una realidad que hasta ahora no había sido capaz de verbalizar públicamente: “Lo voy a decir aquí por primera vez”.
Con una expresión en el rostro de auténtica liberación comenzaba así el relato más sincero del artista en los últimos años: “En muchos momentos de mi vida, en gran parte de ahí viene mi depresión, tuve adicción a las drogas”. El hijo de la tonadillera, con gran emoción, seguía adelante con su confesión dando detalles del problema que arrastró durante muchos años hasta que decidió tomar cartas en el asunto: “Lo pasé muy mal, tenía malas compañías y pensaba que todos mis bajones se iban a solucionar con eso”.
Kiko no tenía inconveniente en asegurar que sus adiciones tenían nombres propios: “Hachís, marihuana y cocaína. Consumía todos los días”. Tras la parte más oscura de su pasado, el joven lanzaba un potente mensaje de superación personal en el que, dos personas cruciales en su vida jugaron un papel determinante para lograr su recuperación: “Gracias a mi mujer, a mi madre y a mis amigos de verdad salí de eso y quería decir a toda la gente que se puede salir. Que eso es algo malo”.
El primogénito de Isabel Pantoja afirmaba: “Por si puede servir de ayuda, que la gente que tiene este problema sepa que se puede conseguir si estás dispuesto a hacerlo”. Un final feliz que no estuvo exento de sufrimiento durante el tiempo que estuvo poniéndose en manos de profesionales: “Tenía temblores, mal humor y, a eso, únele que perdí casi 50 kilos en ocho meses” (motivo por el cual el artista estuvo retirado de su trabajo durante casi diez meses).
Con su estremecedor relato Kiko volvía a poner la lupa sobre dos de las mujeres más importantes de su vida, su madre, Isabel Pantoja, y su esposa, gracias a la cual ha logrado dar el paso más importante: “Fue mi mujer gracias a la que aprendí a disfrutar de la vida y la que me enderezó”.
Su sinceridad no terminaba aquí ya que, el intérprete de Mentirosa se atrevía a revelar nuevos datos del duro tránsito por el que aún sigue caminando, hasta su recuperación total: “Hace un año y medio que soy una persona limpia. Me costó lo más grande. Hoy en día sigo con mi tratamiento y haciéndome las pruebas para que mi familia compruebe que sigo cumpliendo con mi deber”.