Otro mazazo para Isabel II: condenan a 10 meses de cárcel a su primo por agresión sexual
A la delicada salud del duque de Edimburgo se le suma la condena a diez meses de prisión de Simon Bowes-Lyon, primo de la Reina Isabel II de Inglaterra, que abusó de una chica en su castillo de Escocia.
Isabel II no gana para disgustos. Tras el ingreso hospitalario de su marido, Felipe de Edimburgo, la Reina ha recibido en las últimas horas otra mala noticia. Un primo suyo ha sido condenado a 10 meses de cárcel por la Corte Regional de Dundee como autor de un delito de agresión sexual sobre una joven. Se trata de Simon Bowes-Lyon, conde de Strathmore, quien abusó de una joven en su castillo, ubicado en la localidad escocesa de Glamis, en febrero de 2020. Este histórico edificio fue donde vivió de niña la fallecida madre de Isabel II, nacida como Elizabeth Bowes-Lyon.
Simon tiene 34 años y es hijo de un primo hermano de la monarca británica. El condenado ha entonado el mea culpa por su mala actuación, declarando ante el Tribunal estar «muy avergonzado de mis acciones, que han causado tanto pesar a una invitada en mi casa». «No creí que fuera capaz de comportarme como lo hice, pero tengo que aceptarlo y asumir la responsabilidad», ha dicho.
La víctima no ha sido identificada pero el relato de los hechos sí que ha trascendido: El primo de Isabel II entró a la fuerza en la habitación de la mujer, la agarró por los pechos, le puso la mano en el camisón y la obligó a sentarse en la cama diciéndole que ‘la iba a f…» relata una fuente en el ‘Daily Mail.
Este es otro quebradero de cabeza para la longeva monarca. No hay que olvidar que su hijo, el príncipe Andrés, está todavía a la espera de saber el desenlace de su involucración en el caso Epstein. Hace meses que desde Buckingham se decidió apartar de la actividad al hijo preferido de la Reina. Ha desaparecido completamente de la vida oficial, solamente alguna aparición puntual de carácter relativamente privado como la cena con el embajador de China, o la imagen que hace unos meses compartía Sarah Ferguson en su perfil de Instagram en la que el Duque la ayudaba en una de sus tareas de voluntariado.
Los próximos meses se antojan clave en el devenir de este escándalo sexualq que sacudió a Inglaterra en 2020 y que dejó muy tocada a la Familia Real, caracterizada por su pulcritud. La reciente e inesperada detención de la mano derecha de Epstein, Ghislaine Maxwell abrió una nueva vía de cara a las investigaciones del FBI. Está previsto que el próximo mes de junio se celebre su juicio. Las autoridades han asegurado en varias ocasiones que han tratado de ponerse en contacto con el equipo legal del príncipe Andrés sin encontrar respuesta. Se avecinan tiempos complicados.
Por si fuera poco, Isabel II continúa muy pendiente del estado de salud de su marido. El duque de Edimburgo fue ingresado en el hospital Eduardo VII de Londres aquejado de un malestar. El último en hablar de su estado de salud fue su nieto, el príncipe Guillermo, que estuvo visitándolo en el centro médico recientemente: «Está bien, lo están vigilando», comentó a su salida mientras guiñaba el ojo. Buckingham siempre ha sostenido que Felipe permanece consciente y de buen humor y que su situación no estaba relacionada con el coronavirus. No obstante, este hermetismo en torno a la salud del marido de la Reina no hace más que acrecentar la preocupación en Reino Unido. A sus 99 años – el próximo mes de junio hace 100- el duque siempre se ha caracterizado por tener una salud de hierro. Sin embargo, en los últimos tiempos ha sufrido algún que otro síntoma de debilidad consecuencia de su longevidad. Pero como dicen los ingleses, ‘no news is good news’.