Fran Álvarez y Belén Esteban, una relación de altibajos
Esta tarde hemos conocido la triste noticia del fallecimiento de Fran Álvarez, uno de los hombres que han marcado la vida de Belén Esteban con una relación poco estable que terminó en un sonado divorcio.
Tras la separación del hombre que le hizo saltar a la fama, Jesulín de Ubrique, Belén Esteban encontró a su compañero de vida en un amigo de los de siempre, Fran Álvarez. Siempre apartado de los medios, Fran continuó trabajando en el negocio familiar durante todo el tiempo que estuvo con Belén y el noviazgo terminó en una boda que tuvo lugar el 27 de junio de 2008. El matrimonio estuvo lleno de altibajos e innumerables crisis hasta que en 2012 decidieron poner el punto y final a su historia, tras una crisis más en la que ‘la princiesa del pueblo’ dejó los papeles para hacer efectivo este trámite en el local donde trabajaba su hasta entonces marido, sin previo aviso, lo que a él causó una gran sorpresa.
Antes de esto, la pareja intentó salvar la relación decidiendo ir conjuntamente al psiquiatra para intentar superar los problemas que le impedían seguir hacia adelante, pero no pudo ser. Cuando el divorcio se hizo efectivo la colaboradora siguió con el tratamiento, mientras que el camarero, que abandonó la casa que compartían en Paracuellos del Jarama para volver a vivir con sus padres, desistió con la intención de continuarlo por su cuenta. Según publicaba Diez Minutos, la terapia podría haber sido el resorte que hizo saltar por los aires el matrimonio, ya que según contaba la publicación Belén se dio cuenta que no tenían la misma visión de la vida y mientras que ella estaba siguiendo las pautas médicas rigurosamente, él no se lo tomaba tan en serio.
Desde entonces sus vidas tomaron caminos separados hasta que en 2017 Fran decidió romper su silencio en una exclusiva a la revista ‘Lecturas’ en la que calificó de ‘error’ su matrimonio con la televisiva y lamentaba haber perdido cinco años de su vida con ella. En esta entrevista, el camarero habló abiertamente de la adicción al alcohol que sufrió por aquella época e incluso confesó que llegó a coquetear con otras sustancias. Aunque se encontraba visiblemente recuperado, reconocía que seguía en tratamiento psicológico.
Ya en 2018 la expareja se tuvo que volver a ver las caras por una denuncia que ‘la princesa del pueblo’ puso a un conocido de Fran por grabar unas conversaciones de la entonces pareja. A la cita estaban llamados, además de Fran y Belén, Toño Sanchís, su entonces representante y la periodista María Patiño en calidad de testigo.
Un año después 2019, cuando la de Paracuellos anunció su intención de casarse por la iglesia con su actual pareja, Miguel Marcos, fue cuando los caminos de Fran y Belén se volvieron a cruzar. Ella le pidió la nulidad eclesiástica, ofreciéndose a pagarla de su bolsillo, algo a lo que el se negó: “Todos estos años no he tenido problema en firmar los papeles para la nulidad matrimonial. No me he negado nunca. ¡Ahora no te los firmo porque no me da la gana!”, declaraba de nuevo para Lecturas el camarero, una entrevista en la que también hacía público que acababa de salir de una clínica de Proyecto Hombre en Burgos en la que había permanecido durante seis meses y se mostraba orgulloso de sus logros.