Eugenia Martínez de Irujo sufre un accidente y va al hospital en el que ha nacido su sobrino sin saberlo
La condesa de Osorno dio a luz el pasado lunes, 4 de marzo, en Madrid
Tanto Belén Corsini como el recién nacido se encuentran en perfecto estado
Carlos Fitz-James Stuart y Belén Corsini están de enhorabuena. El matrimonio acaba de abrir un nuevo capítulo de sus vidas al convertirse en padres primerizos. El recién nacido, al que han llamado Carlos, nació este lunes, 4 de marzo en Madrid. Aunque la discreción ha formado parte de los nueves meses de dulce espera, sí que se ha podido ver, con cierta discreción cómo Belén ha mostrado su barriguita mientras estaba embarazada y paseaba por las calles de la capital. Ahora, que se ha conocido esta buena nueva, también ha salido a la luz un detalle cuando menos llamativo y que sitúa en el foco mediático a Eugenia Martínez de Irujo, pero ¿qué ha pasado?
La curiosa reacción de Eugenia Martínez de Irujo
La duquesa de Montoro ha acudido este miércoles, 6 de marzo, a la clínica Ruber de Madrid, mismo lugar en el que ha nacido su sobrino. Sin embargo, la sorpresa ha llegado, cuando al ser preguntada por los reporteros que se encontraban en las inmediaciones ha confesado que no se había enterado del nacimiento del hijo de Carlos Fitz-James Stuart y Belén Corsini. De hecho, ella ha contado que se ha desplazado hasta el centro sanitario porque se ha cortado y ha ido a hacerse unas curas.
Con gesto incrédulo, Eugenia no entendía la situación y se ha limitado a decir que «me he caído y me he rajado entera y tengo puntos», ha dicho en un primer momento». Después ha confirmado que no se ha «enterado de nada». Segundos después se ha marchado en un vehículo privado, asegurando que el incidente que ha tenido le dolía.
Una boda por todo lo alto
El recién nacido llega al mundo tres años después de la boda de sus padres, celebrada el 22 de mayo de 2021 en los versallescos jardines del Palacio de Liria. La pareja se dio el ‘sí quiero’ rodeada de sus familiares y amigos más cercanos, atendiendo a las restricciones que marcadas la pandemia del coronavirus que, por aquel entonces, afectaron al desarrollo de eventos multitudinarios.
Carlos Fitz-James llegó al altar del brazo de su madre, Matilde Solís, la madrina de la boda, vestida con un diseño de Caprile en color rojo. Por su parte, la novia hizo su entrada junto a su padre, Juan Carlos Corsini. Para el gran día, Corsini se enfundó en un elegante diseño blanco de inspiración romántica de Navascués, una de las firmas favoritas de la alta sociedad española.