El misterio que rodea el estado de salud de Michael Schumacher
Es uno de los grandes nombres dentro de la Fórmula 1 pero se desconoce cuál es su verdadero estado de salud tras haber sufrido un grave accidente hace cinco años
Hoy se cumplen 5 años desde que Michael Schumacher sufrió el accidente que cambiaría su vida para siempre. El alemán se encontraba disfrutando de una jornada de ski junto a su hijo cuando se precipitó contra unas rocas con tal violencia que el casco que llevaba se partió por la mitad y sufrió gravísimos daños cerebrales.
Aunque en un primer momento se temió por la vida del siete veces campeón, la rápida atención médica sirvió para lograr estabilizarle. En junio de 2014 el piloto despertó del coma en el que estaba desde el día del accidente y en septiembre del mismo año se publicó el último parte médico que consta sobre la salud de Schumacher. En él se informaba de que Michael llevaba meses evolucionando favorablemente pero todavía tenía un largo camino por delante. Y desde ese momento, todo lo que rodea el estado de salud de Schumi es un auténtico misterio.
En las últimas semanas han surgido dos informaciones que indicarían que el que fuera líder de Ferrari se encuentra mucho mejor de lo que se da por hecho, pero lo cierto es que nadie de su entorno ha confirmado ni desmentido nada.
A mediados de diciembre Jean Todt, presidente de la FIA, sorprendió al mundo al revelar que había visto el Gran Premio de Brasil junto a Michael y en su casa. Aunque no reveló en qué estado se encontraba el germano, la noticia fue de lo más reveladora ya que son muchas las voces que llevan años apuntando a que su estado era vegetal y esta información apunta hacia la dirección contraria.
Además, una semana después, el Daily Mail publicó que Shumacher no está encamado ni depende de ningún aparato médico para hacer una vida normal, algo que encajaría con las declaraciones de Todt pero que, de nuevo, ha sido una auténtica sorpresa para el mundo del automovilismo. Fieles a su hermetismo, desde el núcleo más cercano al piloto siguen sin pronunciar una palabra acerca de la situación en la que se encuentra el campeón. Ajeno -o no- a todo lo que se especula sobre él, Michael continúa en Suiza, en una casa completamente adaptada a sus necesidades médicas, recibiendo un tratamiento que, según medios internacionales, supondría un coste de cerca de 55.000 euros semanales.
En la actualidad, y aunque se desconoce si su padre es consciente o no, es Mick Schumacher -con solo 19 años- quien sigue llevando el apellido de su famoso progenitor a todos los circuitos de Fórmula 3, donde podría ser uno de los aspirantes a ocupar el trono de Vettel dentro de Ferrari.