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Cada vez con más frecuencia, los futbolistas hacen una apuesta decidida por el lujo fuera de los terrenos de juego. Lo vemos en su estilo de vida. Como optan por los mejores coches, las mejores viviendas, la ropa exclusiva y por caprichos cuando menos aspiracionales. Sus jugosos contratos deportivos y publicitarios les permite llevar un tren de vida elevado y Cristiano Ronaldo es uno de los mejores embajadores de ello.
El exjugador del Real Madrid siempre se ha caracterizado por lucir piezas únicas. La última la hemos apreciado durante una de sus intervenciones más gloriosas, para recoger el trofeo que le acredita como máximo goleador de la historia. Fue en la gala The Best de la FIFA hace unos días cuando todos los focos se dirigieron a su muñeca cuando subió al escenario a recoger el galardón.
Impecable con su traje, algo brillaba con luz propia en su look. Se trataba de un reloj completamente cubierto de diamantes. Ni un solo milímetro sin esta gema preciosa. El lujo rezumaba desde su esfera hasta la correa, pasando por la aguja. Se trataba del modelo Cintrée Curvex Tourbillon Cintrée Curvex Tourbillon de la casa relojera suiza Franck Muller, fundada en 1992.
Esta pieza de coleccionista destaca por su caja en forma de barril; en oro blanco y con 600 diamantes de talla baguette dispuestos por toda la estructura del reloj. En su interior guarda un tourbillon, una de las maquinarias más valiosas de la alta relojería que completa esta obra de arte. Su precio no es baladí ya que en mercado puede llegar a costar 1.600.000 euros, cifra que se explica por su exclusividad puesto que solo hay uno en el mundo y lo tiene Cristiano Ronaldo.
El delantero del Manchester United ya mostró otro reloj de la casa helvética en una publicación de Instagram de hace un año y medio. Entonces posó con un Caviar Tourbillon de Jacob & Co valorado en 2 millones de euros, pero también se le vio con un Bvlgari. Puro lujo que algunos detractores han tachando de ostentación.
Sea como fuere, no cabe duda de que Ronaldo es un auténtico coleccionista de relojes de alta gama, lo mismo que de coches deportivos. Esta es otra de sus grandes pasiones. Imposible olvidar modelos adquiridos como el Ferrari Monza SP2 con motor V12 de 810 CV; un Bugatti Centodieci que lució en 2019 y del que tan solo se fabricaron 10 unidades; Mercedes Benz AMG G63 que le regaló Georgina Rodríguez en el cumpleaños de 2020; un Bugatti Chiron o un Lamborghini Aventador, considerado uno de los coches más veloces del planeta. Durante su larga carrera le hemos visto conducir el Chevrolet Camaro (40.000 euros); Ferrari F12 TDF (400.000 euros); Range Rover Sport (115.000 euros); Mercedes AMG Gle (146.000 euros); un Bentley Continental (175.000 euros) o un McLaren Senna valorado en 1 millón de euros.