Cayetano Rivera no tiene COVID y explica por qué decidió no ir al funeral de su tío
Su tía, Teresa Rivera, preocupó a todos al decir que Cayetano Rivera no había podido ir al entierro de 'Riverita' por haberse contagiado de coronavirus. El diestro cuenta toda la verdad.
Cayetano Rivera no se ha contagiado de COVID-19. La sombra de la duda se había instaurado desde que el pasado viernes. Su tía, Teresa Rivera, dijo durante el tanatorio de su hermano José Rivera ‘Riverita’ que había hablado con Francisco Rivera pero no así con Cayetano y que creía que tenía el temido virus. Mientras Kiko y Fran no acudieron a darle el último adiós a su tío por las restricciones de movilidad, el marido de Eva González no hizo por otro motivo.
Cuatro días después, el diestro ha decidido romper su silencio para confirmar si tiene COVID o no y explicar cómo tomó la dura decisión de no despedirse de su tío, con quien había estado un día antes de su fallecimiento: «El jueves pasado fui a ver a mi tío ‘Riverita’ al hospital. Una vez allí, me enteré de la detección de un brote Covid en su planta. Por eso decidí, por voluntad propia, aislarme hasta poder hacerme una prueba PCR. El resultado: negativo. Y tengo intención de seguir así». Unas explicaciones convincentes y que dejan claro que Cayetano Rivera cumple a rajatabla las medidas de contingencia impuestas, así como el consejo de los médicos que piden a la población ‘autoconfinarse’.
El hermano de Paquirri no pudo vencer al cáncer contra el que llevaba años luchando y su vida se apagó a los 75 años. Los últimos meses eran poco menos que un calvario para él y para quienes le rodeaban ya que su salud era muy delicada. Cayetano Rivera estaba tremendamente unido a su tío y buena prueba de ello es que acudió al hospital a verle tan solo unas horas después de su fallecimiento.
Aunque todos los sobrinos publicaron fotografías para despedirle en sus cuentas de Instagram, especialmente emotivas fueron las líneas de Cayetano: «Hoy en el cielo están de suerte… «, comenzaba escribiendo. ‘Mi edad es mi sabiduría’, decía. En su tarjeta de visita un sin fin de oficios, ‘Torero’ del que más se enorgullecía. Tocado con la varita de Dios para ser un genio pero de chalado no tenía nada, lo suyo era otro tipo de delirio, otro tipo de locura. Apasionado de los toros, amante de la risa, capaz de volar y de hacerte soñar desde una silla. Su vida en un folio sería trazos de colores, flores, estrellas, la luna… El mundo ahora, tío José, es un poquito peor sin la magia de tu fantasía. Gracias por tu imaginación, por enseñarme a vivir desde tu perspectiva. Gracias tío José por haber existido en mi vida. Te voy a echar de menos pero tu recuerdo será mi sonrisa. Te quiero tío José, nos vemos en la otra orilla».
Cayetano fue artífice de la ya famosa reunión en Barbate de hace unas semanas. Kiko Rivera, Francisco Rivera y él mismo se desplazaron hasta la localidad gaditana donde residía su tío. El objetivo era que Kiko conociera por primera vez y en persona a Riverita. Sus dos hermanos sabían que su llama se estaba apagando y querían que al menos tuviera la oportunidad de conocer a su familia paterna.
El hijo de Isabel Pantoja se despidió así de su tío en redes sociales: «Descansa en paz Tito. Solo lamento no habernos podido conocer más. Una pena pero me quedo con ese regalo que guardaré con todo el cariño del mundo. Dale besos a papá».
De vuelta a Cayetano Rivera, el torero ha sido visto en los últimos días pasear por Madrid junto a Eva González con el brazo en cabestrillo a consecuencia de una intervención quirúrgica. El diestro tenía un dolor en el pulgar derecho que no remitía y decidió ponerle fin poniéndose en manos de un prestigioso doctor.