Arantxa Sánchez Vicario, la pregunta sin contestar en su entrevista más sincera
Arantxa fue la tercera invitada del nuevo programa de Mamen Mendizábal
Arantxa Sánchez Vicario ha sido la nueva protagonista de ‘Palo y Astilla’, el nuevo programa que presenta Mamen Mendizábal donde entrevista a distintos personajes con los que repasa su vida y, de una manera especial, sus relaciones familiares. No lo tenía fácil la tenista, después de haber acaparado numerosas portadas hace años, cuando protagonizó una agria polémica con sus padres al acusarles de manejar su vida, pero especialmente sus finanzas. La deportista recordó cómo fueron sus inicios en el deporte donde se convirtió en una de las mejores tenistas españolas de todos los tiempos, siguiendo la estela de sus hermanos, Emilio y Javier, que ya despuntaban en esta modalidad. También rememoró sus años en Marbella entrenando con algunos de los tenistas alemanes que también llegaron a lo más alto, y por supuesto habló del problema con los suyos, así como de su divorcio.
La charla transcurrió con tranquilidad, la catalana reía y se emocionaba también al revivir aquellos inicios sola, rodeada de alemanes con los que no podía intercambiar palabras y cómo se escapaba del internado a Marbella para poder hablar, durante unas horas, en castellano. Y aunque no puso pegas a la hora de hablar sobre las distintas polémicas que han rodeado su vida personal, solo hubo una pregunta a la que no quiso responder: «¿Te has sentido el motor económico de tu familia?», interpeló la periodista. Tras un breve silencio, Arantxa fue tajante: «No te voy a contestar».
Fue en el año 2012 cuando publicó ‘Arantxa, ¡Vamos! Memorias de una lucha, una vida y una mujer’, un libro de memorias que supuso el principio del fin de su relación con su familia. En él acusaba a sus progenitores de haber controlado su vida y su economía hasta el punto de desvelar que de todo el dinero que había ganado, poco quedaba debido a la mala gestión de su padre. Arantxa aprovechó su presencia en ‘Palo y Astilla’ para agradecer a sus progenitores todo lo que han hecho por ella: «A pesar de todo lo que ha podido pasar son muy importantes para mí. He hablado con todos los miembros de mi familia y ellos son quienes están conmigo a mi lado», dijo emocionada. Y aseguró que están intentando tener la misma relación que mantenían antes de que ocurriera todo. «Pedir perdón cuesta, pero yo ya lo he hecho y mi familia lo sabe. Lo que se hizo, el presente lo cambiará», afirmó.
«Yo di el paso para que todo eso cambiara. En estos momentos es lo que estoy haciendo, para poder disfrutar todos juntos otra vez», confesaba. «Nunca es suficiente decirles cuánto les quiero. El amor incondicional que siempre he tenido hacia ellos me hubiera gustado decírselo mucho más, pero no hay momentos suficientes». Su padre falleció en plena polémica, y llegó incluso a llevarle a los tribunales, una situación que según ella, «se fue de las manos». «Me hubiera gustado estar más con él de lo que pude, aunque me despedí de la mejor forma que pude», añadió antes de afirmar que ha sacado la disciplina de su madre, Marisa, y la fortaleza de su padre, Emilio.
Su divorcio
Además de sus padres, también habló de su matrimonio con Josep Santacana. Arantxa se centró en su marido -al que su familia no veía con buenos ojos-. Fueron muy felices, tuvieron dos hijos y él estuvo junto a ella el día que todo estalló por los aires con sus padres y sus hermanos. Pero todo terminó hace algo más de tres años y ahora siguen dirimiendo sus problemas en los tribunales. «Yo estaba enamoradísima, lo di todo y no fui recompensada. Lo bueno es que tengo unos hijos maravillosos y doy la vida por ellos».