Ana Boyer tras los pasos de Tamara Falcó: gana su primer ‘reality’ de televisión

La segunda edición del formato más dulce de la televisión ha llegado a su fin tras varios episodios. Ana Boyer (34) se ha convertido en la flamante ganadora de Bake off: famosos al horno. La hija de Isabel Preysler (73) coge el testigo de Pablo Rivero que ganó la pasada temporada, bajo el nombre Celebrity Bake off emitida en 2021, en Amazon Prime Video. Con esta victoria, Ana sigue los pasos de su hermana Tamara Falcó (42), que ganó la cuarta temporada de MasterChef Celebrity en 2019. De hecho, la diseñadora se propuso entonces continuar desarrollando su afición por la cocina, y para ello decidió apuntarse a una de las más prestigiosas escuelas de gastronomía, Le Cordon Bleu.

La férrea disciplina de Ana Boyer ha marcado su trayectoria en el programa, en el que también formó parte de él su hermano mayor, Julio Iglesias Jr.. Sin embargo, el cantante abandonó la competición en las semanas iniciales, al ser uno de los primeros expulsados. Tras semanas enfrentándose a los diferentes retos, Ana ha llegado a la final junto con Blas Cantó y Rocío Carrasco.

El premio que ha obtenido la ganadora ha sido de 100.000 euros, que debía donar a una ONG. Ana Boyer, que se mostró muy emocionada al poder lograr este primer puesto en el que es su primer concurso televisivo, eligió a Mensajeros de la paz, la conocida fundación creada en el año 1962 por el padre Ángel. «Tuvela oportunidad hace unos años a irme un verano a El Salvador con ellos, a trabajar en uno de sus centros», recordó ya con su trofeo en la mano.

El guiño de Ana Boyer a su padre

En la prueba decisiva que determinaría quién sería el ganador, los tres aspirantes tuvieron que elaborar una tarta de dos pisos con dos bizcochos de diferente sabor y con un relleno diferente. La decoración del postre tenía que tener relación con su película favorita. Ana escogió a James Bond para rendir homenaje a su padre, Miguel Boyer, fallecido el 29 de septiembre de 2014.

«Yo desde que era pequeña empecé una tradición con mi padre muy especial, que era que todos los fines de semana que podíamos intentábamos un día ponernos una película. Nos cogíamos nuestra tableta de chocolate favorita y nos poníamos y nos poníamos una película de James Bond. Entonces, a mi ya de por si siempre me han gustado las películas de acción si ya encima se convirtió en ese momento único que siempre compartía con mi padre pues ya, favoritas para siempre», indicó Ana. Tras la introducción que hizo sobre su dulce, confesó que su padre para ella lo era «todo». «El mejor padre del mundo. Nada me da más satisfacción y más alegría que intentar plasmarlo en una tarta», añadió.