La Policía localiza a Errejón en 2 cámaras de seguridad la noche de la patada en actitud agresiva

Al menos dos cámaras del Ayuntamiento de Madrid captaron al diputado Íñigo Errejón, portavoz de Más País, la noche del 2 de mayo de 2021 en el madrileño barrio de Lavapiés. Iba vestido de azul, como su denunciante explicó ante la Policía, no llevaba gafas y estaba en el lugar y la hora a la que A.D.C., la persona que le ha denunciado, dijo ante los agentes de la Comisaría de Policía Nacional de Centro (Madrid), donde formalizó su declaración. En las imágenes se puede ver al diputado en actitud agresiva abandonando el lugar de los hechos justo después de patear a la víctima. De hecho, los testigos coinciden en señalar que los acompañantes de Errejón se lo tuvieron que llevar del lugar.

La Policía Nacional pidió el mismo día 3 de mayo, tras recibir de madrugada la denuncia de A.D.C. contra el diputado Íñigo Errejón, las grabaciones «de las cámaras Domos instaladas en vía pública por el Ayuntamiento de Madrid y gestionadas por la Sección de Análisis de Información (SECAI) de la Dirección General de la Policía Municipal de Madrid».

El día 4 de mayo se amplió la solicitud de grabaciones tras ampliar el «perímetro de interés». Dos agentes acudieron el 4 de mayo a la zona y comprobaron que en la intersección de las calles donde ocurrieron los hechos había varios comercios: «Son una peluquería y un herbolario (ambos cerrados a la hora en la que ocurrió la agresión) así como una tienda de alimentación cuyo dependiente manifiesta no haber presenciado el hecho».

Una de las últimas diligencias practicadas hasta el momento consiste en el visionado de las imágenes grabadas aquella noche. El informe dice que "la agresión no es apreciada por el policía al no encontrarse ninguna de las cámaras en la intersección donde se produce", pero continúa el informe asegurando que "sólo llega a apreciarse a un grupo de en torno a ocho personas en una actitud normal, situadas minutos antes de la agresión en la confluencia de la Plaza de Lavapiés con calle de la Fe". "Observándose entre ellas a una persona que encaja con la descripción del presunto autor de los hechos, caminando por la calle de la Fe hacia el cruce con la calle Buenavista, así como en otro de los vídeos abandonando el lugar mientras camina por la calle de la Fe en dirección a la calle Salitre, girándose en actitud desairada hacia el lugar de donde provenía", aunque probablemente el policía que ha escrito el informe pretendía decir de forma airada, ya que el adjetivo desairado no se entiende en el contexto de una agresión en la que, además, los testigos coinciden en asegurar que los acompañantes del diputado se lo tuvieron que llevar del lugar de los hechos.

Es decir, que la cámara de la esquina de la calle Ave María con la calle de la Fe captó al grupo de Errejón llegando al lugar en actitud normal, pero también los grabaron después, marchándose del sitio, en dirección contraria, hacia la calle Salitre, donde hay otra cámara panorámica que captó el grupo, en este caso a Errejón en actitud agresiva, como si hubiese ocurrido algo. Lo que ocurrió, supuestamente, fue la agresión a un hombre de 67 años destapada por OKDIARIO este lunes.

La Policía busca a un repartidor

No fue lo único que la Policía vio en esas grabaciones, ya que también localizaron a un rider, un repartidor, que "captaron las cámaras de grabación del lugar de los hechos" y al que están intentando localizar "para ser oído en declaración como posible testigo de los mismos". Queda el interrogante de saber cómo Errejón fue identificado con tanta facilidad por los policías, algo que se debería, si la denuncia es exacta, a que el denunciante dijo que era el único del grupo que no llevaba mascarilla puesta.

Tanto los testigos como otros vecinos del barrio fueron interrogados por la Policía, que pidió ver también las cámaras del supermercado de alimentación y de un herbolario situado en la esquina donde sucedieron los hechos, pero esos locales estaban cerrados aquel día y sus propietarios no pudieron ver nada.

Las cámaras de estos locales tampoco apuntan a la calle, sino al interior de los mismos, por lo que no pudieron servir a las pesquisas policiales. Sólo estaba abierto el bar La Pianola, que no dispone de cámaras exteriores, por lo que tampoco puede ser de ayuda en este caso.