Lula da Silva, aliado de Podemos y Sumar, garantiza la impunidad de Putin: «No será detenido en Brasil»

Luiz Inácio Lula da Silva, uno de los aliados de Podemos y Sumar en Sudamérica ha salido en defensa del presidente ruso Vladimir Putin, al que le garantiza impunidad al advertir que no será detenido si acude a la próxima cumbre del G20 que se celebrará en Brasil en 2024.

Así lo ha declarado Lula da Silva en un medio indio durante la actual cumbre del G20. Lula ha asegurado que Putin será invitado al encuentro de líderes de 2024 y ha confirmado que, antes de que este evento tenga lugar, tiene planeado asistir a la reunión de los BRICS prevista en Rusia.

«Creo que Putin podría ir fácilmente a Brasil», ha aseverado Lula. «Lo que puedo decirles es que si yo soy presidente de Brasil y él viene a Brasil, de ningún modo lo arrestarían», ha añadido el mandatario brasileño.

El Tribunal Penal Internacional (TPI) emitió en marzo de este año una orden de arresto contra el presidente de Rusia bajo la presunción de crimen de guerra por la deportación forzada de niños ucranianos desde zonas capturadas durante la guerra de Ucrania a territorio ruso.

Pese a la orden emitida, fuentes del Kremlim informaron a mediados de agosto que Putin estaba sopesando la posibilidad de acudir en persona a la cumbre del G20 celebrada esta semana en la capital de India, Nueva Delhi. Este habría sido su primer encuentro con líderes occidentales desde el comienzo de la invasión de Ucrania en febrero de 2022, pero finalmente ha sido su ministro de Asuntos Exteriores, Sergei Lavrov, quien ha acudido a la cita en representación de Rusia.

Lula, Podemos y Sumar, más que amigos

Lula da Silva es uno de los presidentes que pertenecen al llamado Foro de Sao Paulo, organización fundada por el dictador Fidel Castro y que aúna a lo más granado de América. Además de Castro, en este cónclave izquierdista figuran otros sátrapas como Nicolás Maduro, Raúl Castro, Evo Morales, Cristina Fernández de Kirchner o Rafael Correa.

La relación y la defensa de Podemos de todos y cada uno de los integrantes del Foro de Sao Paulo es bien conocida. Son los gobernantes que el partido fundado por Pablo Iglesias y liderado ahora por Ione Belarra e Irene Montero han puesto como ejemplo de libertad y gestión.

La relación con el brasileño Lula da Silva se reforzó cuando desde España los líderes de Podemos, Pablo Iglesias y Alberto Garzón hicieron una encendida defensa del presidente brasileño por la causa a la que fue sometido por corrupción en su país. En 2018, los dos podemitas exigieron al Gobierno que ejerciera la «máxima presión» para que Lula, condenado por corrupción, no entrada en prisión.

El partido de Pablo Iglesias achaca a un intento de las «élites brasileñas» de evitar que «la democracia se restaure» en Brasil con «la vuelta al gobierno» del Partido de los Trabajadores (PT).

«Esta situación es muy preocupante en un país del tamaño y la relevancia política de Brasil, en un contexto regional donde las violaciones de los Derechos Humanos y el autoritarismo no para de crecer», avisaba Podemos.

Por su parte, la vicepresidenta del Gobierno en funciones, Yolanda Díaz, también ha dejado clara su preferencia por Lula da Silva. En la investidura del brasileño, tras derrotar en las últimas presidenciales a Jair Bolsonaro, la líder de Sumar aseguró que «la victoria de Lula fue la victoria del sentido común y la democracia. Su toma de posesión es un momento especial para todas las que creemos en la posibilidad de construir sociedades más justas e integradoras. Hay esperanza, en Brasil y en el mundo».