Montero y el etarra Otegi se reúnen para «superar el régimen del 78» tras salvar a Sánchez de la corrupción

Las máximas representantes de Podemos, su candidata Irene Montero, y su secretaria general, Ione Belara, se han reunido este viernes con el secretario general de EH Bildu, Arnaldo Otegi. Un encuentro dirigido a consolidar la relación entre ambas fuerzas y que llega después de que el partido proetarra pidiera al morado ir en coalición al próximo ciclo electoral de generales y europeas. En la cita, ambas formaciones han coincidido en la necesidad de «superar el régimen del 78», en plena crisis del PSOE.

Podemos se convierte en la primera fuerza, y de momento la única, en reunirse con el partido independentista. La formación de Belarra, sin embargo, no ha querido profundizar en ningún plan sobre una coalición electoral y definen el encuentro como «una reunión de trabajo» para poner en común sus coincidencias políticas. Un encuentro que ha tenido lugar en Vitoria en la sede de Eh Bildu.

No ha habido declaraciones previas ni posteriores al encuentro y tras la reunión, ambos partidos han hecho pública una breve nota conjunta en la que muestran su intención de seguir dialogando para «avanzar en la conquista de derechos y libertades tanto nacionales como sociales y en la necesaria regeneración democrática».

La reunión se enmarca dentro de los contactos abiertos por EH Bildu con todos los agentes políticos que han formado parte del bloque de investidura de Pedro Sánchez y llega después de la reciente aparición del presidente del Gobierno en el Congreso, donde enfrentó la crisis por la presunta corrupción de Santos Cerdán, antiguo alto cargo del PSOE. Ambos partidos han criticado que las medidas anunciadas por Sánchez son insuficientes y Podemos ha acusado al presidente de intentar simplemente dilatar la situación ante este escándalo.

Podemos fue la pieza clave para incluir a Bildu en la ecuación del llamado bloque de investidura que permitió a Pedro Sánchez formar la primera coalición en 2020, con Pablo Iglesias como vicepresidente. Sin embargo, más de cinco años después, las posiciones parecen haberse invertido porque el partido de Otegi se presenta como uno de los socios más leales al Gobierno y los morados se han descolgado de esa mayoría y se declaran «en la oposición».