España ha gastado 20 millones en una década para «democratizar» el mundo árabe

El Gobierno de España lleva gastados más de 20 millones de euros en un programa de acompañamiento a los procesos de gobernanza democrática en países del mundo árabe. En 2012 se inició este plan Masar en el que España ha empujado para «democratizar» países como Túnez, Mauritania, Siria o Egipto. El Ministerio de Asuntos Exteriores lleva una década invirtiendo en políticas de intervención tales como Promoción de los derechos de las mujeres en Marruecos a través del diálogo social y lucha contra la violencia de género o Integración del concepto de derechos humanos en los medios de comunicación jordanos.

En unos días en los que está en boga la situación democrática de Qatar, OKDIARIO ha podido saber de fuentes oficiales cuánto se ha desembolsado en países árabes. El último año en el que se han desarrollado estos trabajos, 2021, se han volcado en la ayuda a las mujeres que viven en esas zonas de África dejando a un lado a los hombres. Entre otros países, se ha actuado en Argelia, Mauritania, Túnez, Libia, Jordania, Líbano, Palestina, Siria, Egipto y Siria.

España  subvencionado planes como «encuesta sobre género y gobernabilidad», «gobernabilidad, género y policía», «acciones de la Agenda 2030 sobre el agua en el mar Mediterráneo y el mundo árabe», «herramientas audiovisuales para cambiar mentalidades sobre mujeres trabajadoras en Egipto», «apoyo a la puesta en marcha, funcionamiento y seguimiento de un Observatorio de Igualdad de género en Mauritania» o «refuerzo de las capacidades de la policía mauritana en materia de tratamiento de la violencia basada en género».

También llama la atención el apoyo a ideas como: «Fortalecimiento de la escuela de funcionarios egipcia», «creación de ambientes seguros y de igualdad laboral para las mujeres, en el sector turístico de Egipto», «capacitación de juezas mujeres en Túnez», «primavera digital en Túnez», «incorporación de un enfoque de género y de derechos humanos en los medios de comunicación jordanos», «movilizar a los medios de comunicación para que apoyen la participación activa de las mujeres en la vida política a través del programa: Mujeres en la política».

«Reflexión»

Fuentes del Ministerio expresan que «tras una década de Programa Masar, la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo (AECID) se encuentra en pleno proceso de reflexión sobre la programación regional en la región mediterránea. Ello implica también un análisis sobre el futuro del Programa Masar». Se abre así la puerta a reformular este programa si se comprueba que no ha tenido un impacto relevante en la calidad democrática de esas naciones.

Estos programas subvencionados se suman a otros controvertidos del Gobierno. Entre otros, OKDIARIO destacó los últimos contratos de la Fundación Internacional y para Iberoamérica de Administración Políticas Públicas (FIIAPP), una entidad que integran varios ministros del Ejecutivo del PSOE y Podemos. Se trataba de decenas y decenas de contratos de más de 100.000 euros cada uno para estrategias de comunicación en Ucrania, planes contra el cambio climático en países de América Latina, laboratorios forenses para Belice y, entre otros muchos conceptos, material policial para Malí, Chad, Mauritania y Burkina Faso.

La Plataforma de Contratación del Estado recoge estas licitaciones tramitadas en los últimos meses que gestiona la citada entidad y sufraga la UE con las aportaciones de los diferentes países comunitarios. OKDIARIO ha localizado conceptos tan extravagantes como 190.000 euros para un contrato de «equipamiento para el tratamiento de datos sensibles de la Administración Tributaria de Cuba» o 335.000 euros para «campañas de comunicación a grupos de usuarios de servicios electrónicos y estrategias de comunicación de marcas públicas en Ucrania». 

También en relación con Cuba, régimen que mantiene deudas millonarias con España, el Ejecutivo de Pedro Sánchez ha tramitado contratos sobre «transformación digital del sector público» (125.000 euros), «plataforma web de inteligencia comercial» (45.000 euros) y, entre otros, «fuentes renovables de energía y la eficiencia energética» también en ese país (213.856 euros).