Los detenidos por el atentado a Vidal-Quadras le vigilaron durante semanas antes de dispararle

Los detenidos por el atentado a Vidal-Quadras le vigilaron durante semanas antes de dispararle, así lo desvela la Policía tras la puesta en libertad de dos de los tres detenidos en Lanjarón y Fuengirola, y el envío a prisión provisional de principal sospechoso, converso musulmán pero poseedor de un perfil que no encaja con el caso. Tanto, que los investigadores no han encontrado todavía una motivación concreta del intento de asesinato.

En el marco de la Operación Tercio los investigadores trabajan distintas líneas sin descartar ninguna hipótesis. Así lo admite la Policía, insisten en que hasta el momento sí ha quedado acreditada la implicación de los detenidos en los hechos, al proporcionar al autor material de los mismos, y el apoyo logístico necesario para llevar a cabo la acción terrorista.

Durante la investigación también se ha podido demostrar que los detenidos prepararon el atentado de Alejo Vidal-Quadras fue preparado de manera meticulosa durante semanas antes del día de los hechos, llevándose a cabo vigilancias sobre la víctima, compras de material para su ejecución y reuniones en distintas partes de España.

En cuanto al detenido en Málaga, los agentes han comprobado su implicación al proporcionar la motocicleta que sirvió de vehículo al autor material del delito, la cual se encontró calcinada en un polígono industrial de Fuenlabrada poco después del ataque.

Ahora, la Policía se centra en localizar al autor material de los hechos, un francés de origen tunecino con múltiples antecedentes en Francia, su país de residencia.

Un sicario poco diestro

Alejo Vidal-Quadras, de 78 años y ex presidente del PP catalán, fue hospitalizado de urgencia a primera hora de la tarde del día 9 de noviembre tras recibir un disparo a quemarropa en la cara junto al número 40 de la calle Núñez de Balboa, en el madrileño barrio de Salamanca. El político salvó la vida gracias a sus reflejos y la poca destreza del sicario que le disparó.

El propio Vidal-Quadras, que aguantó en pie el disparo hasta que llegaron los servicios de emergencias del SAMUR, contó a su familia que sospechaba que el ataque podría estar vinculado con sus relaciones con la oposición al régimen iraní. La Audiencia Nacional se hizo cargo de la investigación tratándolo como un posible atentado terrorista. 

Precisamente, el político recibía este jueves el alta en planta hospitalaria 14 días después de su tentativa de asesinato. Entre tanto, la Policía sigue buscando al principal sospechoso de haber apretado el gatillo: el sicario franco-tunecino con antecedentes en Francia que fue identificado por la Guardia Civil merodeando por la Zarzuela días antes del atentado al político.