Endesa notifica a los sindicatos el cierre de sus históricas centrales térmicas de Teruel y León

Endesa ha notificado este jueves por escrito a los sindicatos que en las próximas semanas iniciará el trámite administrativo ante el Ministerio para la Transición Ecológica para solicitar el cierre de las centrales térmicas de Andorra (Teruel) y Compostilla, en Cubillos del Sil (León).

Según los delegados sindicales de esta última central, Endesa tiene intención de presentar en las próximas semanas ante el ministerio la documentación necesaria para proceder al cierre de ambas instalaciones, en un proceso que podría iniciarse el próximo año.

El presidente del comité de empresa de la planta de Compostilla, Juan Sobredo, ha lamentado «la falta de claridad» de la empresa, que espera que concrete medidas «no traumáticas» para los 200 empleados de la instalación.

Ha añadido que Endesa debería reflexionar sobre su responsabilidad con el territorio donde se ubica esta central, que funciona en Cubillos del Sil desde 1972.

El presidente del comité de empresa de la central de Andorra, Hilario Mombiela, que ha confirmado a Efe la noticia del cierre después de la reunión que han mantenido con representantes de la dirección de la empresa, ha dicho que les han explicado que el Consejo de Administración de Endesa ha aprobado su plan industrial para 2019, que no incluye inversiones en las dos centrales, para adecuarlas a la normativa medioambiental antes de 2020.

El plan será presentado a los inversores el próximo día 21 de noviembre en Milán y «a partir de ahí empezarán los trámites para el cierre», ha apuntado Mombiela.

Recolocar a todos los trabajadores con traslados

La empresa les ha comunicado también la posibilidad de recolocar a los trabajadores de todos «los excedentes de la plantilla» mediante traslados a otras plantas del grupo y les ha indicado que se evitarán «medidas traumáticas».

El comité de empresa de la central térmica de Andorra se reúne esta tarde para valorar las medidas planteadas por la empresa, ha dicho Mombiela, que ha advertido que los trabajadores «no nos vamos a rendir porque seguimos pensando que en Andorra se pueden seguir haciendo las inversiones».

Mombiela ha recordado que los trabajadores habían advertido de la situación desde 2012 y ha destacado que el cierre afectará a mucha gente, y no sólo a los que trabajan directamente en la central.

Ha añadido que los empleados están muy «preocupados» ante las posibles recolocaciones laborales, que en todo caso habría que llevar a cabo con un plan «adecuado».

El responsable sindical ha anunciado que se coordinarán con sus compañeros de la planta de Compostilla para movilizarse y ha recordado que Castilla y León y Aragón han hecho grande a Endesa con sus centrales y la han convertido «en una multinacional», pese a lo que la compañía «no ha mostrado ninguna disposición a invertir para garantizar su viabilidad y futuro».

La sección sindical de UGT-FICA en Endesa ha exigido, ante el anuncio de cierre de las dos centrales, que se prorrogue, con la mayor urgencia posible, el Acuerdo Marco de Garantías, con el consiguiente Acuerdo Voluntario de Salidas, que está en vigor hasta el 31 de diciembre de este año, al tiempo que ha lamentado que los trabajadores se hayan tenido que enterar de los cierres por los medios de comunicación.